“El lugar más seguro de toda Escandinavia”, podría rezar algún cartel de Kieler Street (estreno de Film & Arts el martes a las 22), serie que toma el nombre de un camino fronterizo entre Noruega con Suecia. Algo así como el Chuy nórdico, aunque en vez de uruguayos, brasileños y toallas a buen precio, hay Estado de bienestar, bacalao y exconvictos con nuevas identidades. La serie de diez episodios disecciona justamente lo que se esconde debajo de la idílica postal asociada a esa región del globo. El policial, por otra parte, inicia “Martes Nórdicos”, segmento de la señal dedicado al thriller vikingo que continuará hacia agosto con la emisión de Jordskott.
La entrega sigue a Jonas Schuman (Thorbjørn Harr) quien trabaja en un merendero, está casado con una profesora de secundario y es padre de una hija adolescente. Un buen vecino al que le harán una de esas ofertas que no va a poder rechazar. Chantajear a otros que, como él, tienen motivos para esconder su doble vida. “¿Quién eres?”, se pregunta el protagonista durante el primer episodio. La respuesta en esta serie que tiene puntos en común con Una historia violenta (David Cronenberg; 2005) pero con el temple y aspereza natural del nordic noir.