Titulares de transporte turístico marcharán hoy, a partir de las 10, desde el Teleférico y recorrerán todo el centro de la ciudad para visibilizar la situación crítica que están atravesando desde que se decretó la cuarentena.
Son más de 30 medianas y pequeñas empresas de transporte que se dedican al traslado de pasajeros exclusivamente para el turismo. Si bien ya se permite la circulación interna dentro de la provincia para hotelería, gastronomía y la contratación de guías, éste fue el único rubro que aún está expresamente prohibido dentro de los protocolos que emitió el Ministerio de Turismo y Deportes de Salta.
Los propietarios y operadores de colectivos y combis piden no sólo volver a prestar sus servicios con los protocolos correspondientes, sino que también solicitan una emergencia para, entre otras cosas, poder postergar pagos, como cuotas de los vehículos, patentes o seguros.
Sergio Muñiz es propietario y maneja una de las dos combis con las que siempre trasladó a personas a los principales centros turísticos de la provincia, tanto de manera particular como para agencias que solicitaban su ayuda. Aclaró que la marcha, no es en contra “ni del gobierno nacional ni provincial”, pero que es la única herramienta que tienen para visibilizar la delicada situación que atraviesa el sector.
“Nos confunden con el transporte público, y acá hay cientos de familias que comemos de este trabajo y hace 90 días que no podemos salir a ningún lado”, dijo el transportista, quien añadió que “el turismo que llegaba a Salta, el nacional o el internacional, se movía gracias a nosotros, no lo hacía en el transporte público, sino en el privado”.
Explicó que a partir de la reapertura y la etapa de distanciamiento, esperaban que se flexibilice la situación también para ellos, con los protocolos adecuados para el traslado de pasajeros. Pero nada de eso sucedió, de hecho, la resolución 35/2020 indica que las personas podrán circular sólo en vehículos particulares, taxis o remises, y con una reserva previa en el lugar de destino.
Muñiz subrayó que ellos no pertenecen ni a grandes agencias de turismo, ni son grandes empresarios de transporte, “nosotros vivíamos el día a día llevando gente a recorrer a la provincia, no tenemos espalda para sostener tanto tiempo sin trabajar porque tenemos que seguir pagando la cuota del vehículo, la patente, los seguros, autorizaciones y un montón de cosas más que nos exigen para estar en regla”.
Es por ello que, si bien destacó que no han recibido ningún tipo de ayuda estatal, “tampoco marchamos para pedir subsidios, sino para que nos eximan o nos posterguen vencimientos hasta que volvamos a trabajar”.
Aunque reconoció que muchos de ellos, por ser monotributistas, pudieron acceder al crédito de AFIP de hasta $150.000, confesó que ese dinero se les va en los altos costos mensuales que pagan para mantener sus vehículos, “un colectivo de estos sale arriba de $4 millones, por lo que una cuota no baja de los $30.000, a eso sumale todos los costos fijos que representan sostenerlo y te vas a dar cuenta que es imposible pagar sin la posibilidad de trabajar”.
El operador turístico informó que debido a esta
situación, lograron juntarse todos los prestadores y están conformando una Cámara
de Transportistas del NOA, y aseguró que hoy serán más de 50 vehículos, “desde
combis, minibuses y colectivos hasta los doble piso”, los que recorrerán el
centro de la ciudad, aunque sin ingresar al microcentro “para no infringir la
ley”.