Hace varios años que el trap es el nuevo masivo. La escena que mueve la aguja en lo que es plays, impacto mediático y –cuando se podía– convocatoria. Pero hay pocas variaciones sobre la fórmula, en general centrada en el carisma y el flow de unx MC sobre beats de productores rotativos. Intendente puede parecer un dúo con esas características cuando en vivo se vuelven locos sobre un track disparado. Pero no: lo que los distingue entre los muchísimos proyectos de música urbana de hoy es que no son un dúo de MCs sino más bien uno de productores que también rapean, cantan, componen y tienen la totalidad del control creativo sobre sus tracks.
El beat no es el mero acompañamiento de una letra o flow que hace un beatmaker sino el alma de su propuesta y su marca de autor, tanto o más importante que la palabra. Y de la visión integral de las cabezas de Ignacio Huarte (LaDa6a del Pari) y Agustín Fortuny (Rio del Pari) se desprende una identidad más fuerte y compacta que las que el género suele permitir. Producen, cantan, rapean, componen y son djs. Ambos rodeando los 30, tienen un largo camino recorrido de tocar juntos y separados, siempre en bandas –en el sentido más tradicional– que abarcaron desde post rock hasta afrobeat.
“Fuimos contemporáneos del comienzo de la caída de la banda indie como concepto, del under como una cosa que pertenecía a las bandas en sentido tradicional, o al rock”, explica Ingacio. “En ese momento había gente flasheando con bandas tipo Snarky Puppy, de gente súper virtuosa. Y todos los que tocaban y les iba bien eran músicos académicos. Nosotros tocábamos en bandas under y me empecé a re hartar porque nunca fui un músico virtuoso, trataba de hacerlo así y nunca iba a poder”.
Ambos conjugaban tocar rock con pasión por el baile y la fiesta. La música y la estética del dúo entonces resultó en un puente entre la cultura indie, los djs y el sonido urbano. Intendente es trap, es hip hop y es música electrónica pero a su vez no deja de ser “una banda”. Tienen la energía del hardcore y pulso clubber. Un proyecto para aquellxs que les gusta el trap por su cualidad intoxicante y su espíritu igualmente hedonista y peligroso, pero que suelen hurgar más en Soundcloud que en las batallas de freestyle.
En producción
Según Fortuny, beatmaker principal del dúo, fue la primera vez que encararon juntos un proyecto musical coqueteando con la actualidad musical. Y eso fue hace dos años, con la líbido más orientada a la música de productores que al rock. “En general siempre habíamos sido de un palo más rockero, entonces al trap entramos por ahí también, con bandas más hardcore”, define. E Ignacio completa: “No podía parar de escuchar Death Grips. Y cuando Agustín hizo su primer beat para el proyecto y nos juntamos, mi premisa fue 'hacer Death Grips', aunque después el flash se fue para otro lado”.
El universo conceptual y temático es lo que más los acerca a sus pares traperos. Después, sus influencias sónicas son de lo más eclécticas y hasta nerds: por supuesto que aparecen el hip hop, el funk carioca y los géneros urbanos, pero en el ADN también hay footwork, deconstructed club, house, electro, dubstep. Especialmente sobre ese punto está lo que los hace únicos: en general el trap se vuelve bailable al fundirse con el reggaetón, pero en el caso de Intendente, el trap es más bailable que nunca y es raver.
Incluso uno de sus mejores temas se llama, graciosamente, El tecno: como haciéndose cargo de que no se espera un beat de un conjunto supuestamente trapero. Y si bien no es techno en el sentido ortodoxo, El tecno tiene una frase repetitiva de vibras orientales que es su propia interpretación del clásico loop trapero, sobre una explosión house y EDM. Para saltar en la pista más que para perrear. Ambos coinciden: si pertenecen a una escena, es la escena rave underground.
Era una jodita y quedó
“Mucha gente dice que hacemos trap pero lo que veo en los shows de la escena trap son todos chabones y un escenario. No es 'la jodita'. Muy pocas veces compartimos fechas con otros grupos o bandas, siempre compartimos fechas con djs. Jodita y de repente salimos a tocar”, cuenta Ignacio. Y sigue Agustín: “Nuestra banda toca en la fiesta porque nosotros ya estábamos ahí, no es un espacio que buscamos. Es un espacio que se nos da naturalmente”.
Su último tema, La receta, viene acompañado por un video realizado por Tomás López de Fvtvra, mánager y amigo. Es un hip hop cachondo y funky con un beat completamente adictivo, entre groovero y sensual, a lo Kaytranada pero con el toque podrido necesario. El autor del beat es Chlo, de la misma crew y también de Agva records. Elegir trabajar con otrxs nace de la buena química, de la admiración y de la sinergia que se da natural. “Si nos juntamos es porque nace de una vibra muy piola, si no pasa eso, no nos sale”, cuenta Agustín. Laburar con amigos y entre amigos es parte del plan del proyecto. Videos, vestuario, diseño de flyers, organización de fechas y hasta feats: todo queda en familia.
Y la fiesta es mucho más que esparcimiento, es el caldo de cultivo que permite que todas estas energías se fundan y que la magia suceda. La música que pasan y que hacen los amigues djs y productores es una constante fuente de inspiración. Un círculo virtuoso. “Somos parte de un contexto donde hay un constante feedback creativo e inspiracional. Que El Plvybxy pase todo el tiempo aleteo y guaracha nos da ganas de meternos a hacer algo así, por ejemplo”.
La cuarentena estimuló las facetas solistas: además de participar ambos como djs en fiestas online, Agustín lanzó su primer tema como Rio del Pari, Kilimanjaro e Ignacio está produciendo el suyo. Pero el grupo tiene planes bien concretos, como el lanzamiento de varios singles que ya están casi terminados y el estreno de una colaboración con Sara Hebe y el productor Oniria, que verá la luz a fines de julio y que contará con un videoclip hecho por Ayar Blasco, director artístico de Mercano el Marciano, célebre dibujito de culto argentino de finales de los '90.
Y mientras tanto siguen produciendo, haciendo videos con lo que hay a mano, tocando en fechas online, tanto live como en formato dj set, y manteniendo la llama viva a tracción manija, algo que nunca les costó. “Siempre escuchamos mucha música, tocamos desde adolescentes y yo ahora tengo 32”, cuenta Ignacio. “Sabemos lo que queremos escuchar y por suerte tenemos las herramientas para ejecutarlo. Tuvimos un recorrido largo hasta ahora y confiamos en nuestra capacidad para desarrollar un concepto”, concluyen.