El ex jefe de Inteligencia durante el kirchnerismo, Oscar Parrilli, asistió hoy a la reunión Bicameral de Control y Seguimiento de los Organismos de Inteligencia, para denunciar nuevamente que tanto él como la ex presidenta Cristina Kirchner fueron objeto de un “espionaje político” a través de escuchas telefónicas que fueron difundidas a la prensa. A la salida de la reunión Parrilli denunció la existencia de un “entramado político y judicial” cuyo objetivo es “espiar el funcionamiento de una organización política”. “Lo que le he pedido a la Comisión y al juez Canicoba Corral es una investigación porque acá se han cometido varios ilícitos”, indicó el ex titular de la AFI.
“En primer lugar, la filtración de las comunicaciones a los medios. En segundo lugar, la no destrucción de las escuchas ordenada por Servini de Cubría, cuando esas conversaciones no tuvieron ningún resultado. En tercer lugar, que esto es parte del espionaje político de mi persona y en definitiva sobre la ex presidenta. Y en cuarto lugar, porque hay una tarea de inteligencia interna política llevadas adelante por los organismos de inteligencia, lo cual está prohibido por ley. Están haciendo inteligencia interna sobre dirigentes políticos”, indicó.
“El entramado se inicia con jueces que piden la intervención de los teléfonos con escuchas directas, en tiempo real, cosa que no es usual salvo en casos de secuestros extorsivos o narcotráfico”, dijo a Página/12 un colaborador cercano de Parrilli. Y amplió: “Con esas escuchas, se ve si hay algún delito. Pero ninguno de los dos jueces presentó nada, ni Servini de Cubría –quien ordenó destruir las escuchas- ni Lijo. Luego, las denuncias las hicieron los fiscales, en especial Marijuan, a partir de lo que se filtró a la prensa, lo cual también es ilegal.”
En ese sentido, Parrilli calificó como “paradójico” que haya fiscales que lo denuncien. “Yo soy víctima de estos delitos: de una intervención telefónica prácticamente sin motivo, de las transcripciones telefónicas filtradas. Pero los fiscales hasta me quieren meter preso. Yo creo que son cómplices de estas maniobras delictivas, en particular Marijuán y Moldes”, enfatizó. “Todo está armado sin ninguna prueba. Algunas de las filtraciones de mi teléfono están en Mercado Libre, es escandaloso”, insistió.
Ante la pregunta de un periodista sobre si hacía alguna autocrítica sobre el contenido de las escuchas filtradas, Parrilli consideró que “si hay alguien que está apretando a los jueces es el Gobierno actual. Están usando a Clarín y La Nación para apretar a los jueces”. “Quieren armar una puesta en escena de noticias mediáticas poniéndonos como terroristas, narcotraficantes y ahora poco menos que pedófilos, en cualquier momento”, concluyó.
Luego de que se filtrara la primera escucha, en enero, el fiscal Guillermo Marijuán pidió investigar a Cristina Kirchner por el supuesto "armado" de causas contra el ex espía Antonio Stiuso. Sin embargo, el juez Rodolfo Canicoba Corral archivó la causa.
Parrilli denunció, en paralelo, a la “cadena de custodia” de las escuchas ordenadas por los jueces, que luego fueron filtradas a los medios. El ex jefe de la AFI apuntó contra presuntos responsables: el supremo Ricardo Lorenzetti, el director general de Captación de Comunicaciones de Corte Suprema, Martín Irurzun, al actual titular de la AFI, Gustavo Arribas, y su segunda, Silvia Cristina Majdalani, entre otros.
La reunión de la Comisión Bicameral contó con presencia de todos los bloques. Tras el testimonio de Parrilli, se decidió que un grupo de cuatro legisladores se dedique a seguir el tema con independencia de las causas que están en la Justicia.