Pocas veces se discutió sobre la pandemia y la cuarentena con la crudeza que instaló una pregunta del consultor político Raúl Timerman y la respuesta que le dio Silvia Mercado, naturalizando la posible muerte de decenas de miles de personas. La virulencia del choque fue retomada por el gobernador Axel Kicillof, que lo utilizó para explicar su posición frente a los críticos del aislamiento social impulsado por el Gobierno.
Todo empezó con un tuit de Raúl Timerman, director de Grupo de Opinión Pública. "Los cansados, estresados, aburridos y angustiados por la cuarentena, se sentirían más aliviados si en lugar de 1000 muertos tuviéeramos 20.000?"
Las repuestas se repartían entre los que felicitaban y los que se concentraban en sus padecimientos económicos para cuestionar la pregunta hasta que apareció un comentario de Silvia Mercado, la publicista del macrismo, que empezó su carrera periodística con posiciones cercanas al peronismo.
"La verdad que sí. Encontraríamos más sentido a las restricciones. Así, es muy difícil", fueron las palabras que desataron la tormenta.
Esta vez llovieron los tuits, casi sin excepción para criticarla por la aparente liviandad con que se codeaba con la sombra de decenas de miles de muertos. Una amenaza que la realidad brasilera ya transformó en realidad. Uno de los primeros fue el propio primo del ex canciller Héctor Timerman. "Es fácil de lograr. Mañana volvamos a la normalidad y olvidémosnos de la existencia del coronavirus. Cuando lleguemos a los 20.000 muertos reinstalamos la cuarentena", aseguró para dejar paso a una enorme cantidad de respuestas que iban de la ironía al insulto.
El impacto por las palabras de Mercado atravesó buena parte de los programas informativos de la radio y la televisión y llegó al pirulo de tapa de Página/12 , pero este miércoles se sumó de lleno al debate político cuando el gobernador Axel Kicillof lo incorporó al discurso que realizó al inaugurar un hospital en Pilar, donde respondió a las críticas de algunos sectores de la oposición y buena parte de los medios a la política oficial frente a la pandemia. Después de explicar que era el coronavirus lo que paralizaba la economía y no la cuarentena , puso el acento en las consecuencias letales de minimizar el impacto sanitario.
"Otros países que no tuvieron la valentía, la decisión y la capacidad de llevar adelante una cuarentena como la que se llevó adelante aquí, con esfuerzo y sufrimiento, hoy tienen otra angustia que tiene que ver con decenas de miles de muertos. Parece que esto, a los que se dedican a criticar lo que se hizo, no les importa. Escuché a alguien decir que si hubiera más muertos en Argentina, sería más fácil tomar una decisión. Me alarma, porque lo que nos da fuerza para tomar decisiones más o menos drásticas no son los muertos que tenemos que contar, sino las vidas que se salvaron", enfatizó Kicillof en referencia a la revulsiva posición de Silvia Mercado.