Enviado de ANSA, especial para Página/12.
Los diarios Corriere Dello Sport y La Repubblica denunciaron que altos dirigentes de la FIFA y federaciones de fútbol extranjeras se encontrarían involucrados en un escándalo sobre reventa de entradas y derechos televisivos en torno del Mundial de Italia '90.
90 Tour, el operador turíslico oficial del torneo, presentó una demanda judicial contra el Comité Organizador Local (COL) por más de 20 millones de dólares, por el supuesto perjuicio que le habría causado la venta ilegal de boletos del Mundial en el extranjero.
La acusación menciona concretamente a la empresa Mundicorp (sociedad del archipiélago Adidas), estrechamente ligada a la FIFA, dicen el Corriere Dello Sport y La Repubblica.
Según este último diario, Mundicorp y Telemundi, otra empresa ligada a la FIFA, habrían vendido billetes cedidos por las federaciones de fútbol británicas y escandinavas, no obstante tres comunicados oficiales emitidos por la FIFA prohibiendo operaciones en tal sentido.
La prensa destaca que Alfa Romeo y Vini D' Italia, dos de los sponsors oficiales del Mundial, debieron suscribir respectivas cláusulas según las cuales tenían expresamente prohibida la reventa de billetes en el extranjero.
Sin embargo, no habría ocurrido lo mismo con los otros ocho sponsors oficiales del lomeo (Canon, Budweiser, Coca Cola, Fuji, Gillete, Philips y Mars), que habrían entregado 30 mil billetes a Mundicorp para su posterior reventa en Estados Unidos, Canadá y Sudamérica, afirmó el Corriere Dello Sport.
La justicia de Roma fijó para el 11 de julio, tres días después de la finalización del torneo, la fecha de la primera audiencia de la causa iniciada por 90 Tour contra el COL.
90 Tour perdió una primera causa en Estados Unidos por el "secuestro" de boletos por parle de Mundicorp, pero la justicia norteamericana no se pronunció aún sobre los supuestos "daños" que le habría causado la competidora.
La competencia —dijo Corriere Dello Sport— podría haber sido doblemente ilícita: primero porque la exclusividad de la venta de boletos era de 90 Tour y segundo porque los precios ofrecidos por Mundicorp fueron notablemente inferiores.
A su vez, 90 Tour podría ser demandada por el COL a partir de setiembre próximo por los 13 millones de dólares que aquélla aún adeuda sobre un total de 37 millones de dólares que se comprometió a pagar por la venta exclusiva de los boletos en el extranjero.
"El COL —explicó su director general, Luca Di Montezemolo, al Corriere Dello Sport— fue obligado por la FIFA a vender el 50 por ciento de los boletos en el extranjero. De ese 50 por ciento, un 20 por ciento debe venderse en la fórmula de paquete turístico."
El artículo del Corriere Dello Sport revelando las supuestas implicancias de dirigentes de la FIFA en las empresas mencionadas lleva como título "Escándalo mundial".
La prensa italiana había alertado hace ya varios días sobre el fracaso de la venta de boletos en el extranjero, afirmando que los precios de 90 Tour resultaban excesivamente elevados. La polémica se acentuó en los últimos días, al registrarse sorpresivos vacíos en algunos estadios.
Paolo Galli, director general de 90 Tour, informó a su vez que el costo de los paquetes ofrecidos por su empresa —desde 170 a 38 dólares cada entrada— incluye otros servicios, como el traslado al estadio en micro, distintivos del Mundial, etcétera.
Galli agregó que si los precios fueron elevados en otros países, la responsabilidad no es de 90 Tour, sino de las empresas que revendieron los distintos paquetes.
Pero además del escándalo de los boletos, la prensa local polemizó también sobre la cifra que la FIFA dice haber recibido del consorcio Telemundi por la venta de los derechos exclusivos de televisación del torneo. La FIFA —según Corriere Dello Sport— anunció en 1986 "un ingreso de 20 millones de dólares por esos derechos, pero ahora habla de 140 millones, probablemente porque advirtió que aquella cifra era poco creíble".
Pero el Corriere Dello Sport dice que igualmente la cifra de 140 millones resulta "irrisoria" si se la compara con los 280 millones pagados por la ABC por los Juegos Olímpicos de Seúl '88 y con los 1.600 millones de las Olimpíadas de Barcelona '92.
"Rechazamos una oferta superior de Silvio Berlusconi porque queríamos la garantía de que los partidos serían trasmitidos a todo el inundo", dijo el secretario general de la FIFA, Joseph Blatler, al diario La Repubblica.
Sin embargo, este diario advirtió que en Estados Unidos la cadena TNT de Ted Turner pagó sólo 8 millones de dólares por los derechos del Mundial y trasmitió los partidos cortados por la publicidad y para "una audiencia ridícula".