Hace apenas un mes, la autoproclamada presidenta interina Jeanine Añez llevaba en su cuello la tarjeta Virus Shut out a base de dióxido de cloro , que prometía propiedades para evitar el contagio del coronavirus. Este lunes, el mismo comité científico que asesora al gobierno de facto advirtió que utilizar productos a base de esta sustancia, que se usa para la creación de desinfectantes, puede tener “graves daños para la salud”. Sin embargo, el Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Chuquisaca anunció que distribuirá el polémico tratamiento para que lo tomen sus ciudadanos y en otras dos regiones se analiza su uso.
«El dióxido de cloro es una sustancia utilizada como desinfectante de superficies y blanqueador de materiales orgánicos. Su ingesta tiene diversos efectos secundarios», señaló el comité en un comunicado difundido por el Ministerio de Salud.
Durante la última semana surgieron en Bolivia versiones en las redes sociales sobre sus beneficios para combatir la covid-19 que hasta la fecha contagió a 31.524 personas y dejó 1.014 decesos en el país. “Solución mineral milagrosa” es el nombre con el que se comercializa la sustancia, dañina de acuerdo a los especialistas y sin registro sanitario en el país.