La Municipalidad de San Pedro decidió aislar a 200 personas consideradas como casos sospechosos por tener algun tipo de relación con los contactos estrechos del pastor evangélico que, después realizar actividades en su templo y visitar a los fieles en sus propias casas, dio positivo en el test de coronavirus. "Sería injusto que por un irresponsable paguen todos los vecinos", señaló el Intendente de San Pedro, Cecilio Salazar, y afirmó que la ciudad estaba "a punto de pasar a la fase 5 de la cuarentena".

El conflicto se desató el jueves pasado, cuando uno de los practicantes llamó a Salazar para comentarle que el pastor, un hombre de 55 años, tenía síntomas compatibles con los del coronavirus. Ese mismo día le hicieron el hisopado y el sábado el Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas de Pergamino confirmó que el análisis había dado positivo. Tal como indica el protocolo sanitario, la Secretaría de Salud de la localidad quiso saber con quienes había mantenido contacto. Sin embargo, el pastor "se mostró remiso a dar información y nos dijo que tenía su congregación cerrada desde hacía tres meses", precisó el Intendente.

A pesar de la negación del religioso, vecinos y vecinas de San Pedro comenzaron a llamar a la Municipalidad y contaron que el pastor seguía visitando a sus fieles. Hasta el momento se detectaron 30 contactos estrechos, de los cuales solo 5 personas presentaron síntomas compatibles con la enfermedad, por lo que se les practicó el hisopado correspondiente del cual aún esperan los resultados. Sin embargo, estas personas, a su vez, tuvieron contactos con amigos y familiares, por lo que el total de aislados escaló a 200 personas en la localidad, que tiene alrededor de 50 mil habitantes. 

Al enterarse de la situación, el secretario de salud de San Pedro radicó una denuncia contra el pastor ante el fiscal Matías Di Lello, titular de la Fiscalía Federal de San Nicolás. "Las autoridades sanitarias están obligadas a denunciar", señaló Di Lello, quien se encuentra reuniendo las pruebas para el expediente del caso. "Al estar aislado no hay peligro de fuga o de entorpecimiento de la investigación, pero tampoco se le puede tomar indagatoria", explicó el fiscal y señaló que "estamos esperando saber el número de contagios y los detalles sanitarios, que pueden agravar la calificación". La denuncia se enmarca en el artículo 202 del Código Penal, que previene una pena de 3 a 15 años para quien "propagase una enfermedad peligrosa o contagiosa para las personas". Según precisó el fiscal, "si la persona ya estaba notificada se complica aún más".

"Existe la posibilidad de que aparezcan más casos", advirtió Salazar. Hasta ahora, en San Pedro hay 52 casos confirmados, de los cuales 4 ya se recuperaron y otros 48 están activos y transitan la enfermedad en sus casas o en centros de aislamiento extra hospitalarios, según informó la cartera de salud local. 

Este sábado, cuando se confirmó que el pastor había dado positivo, la Mucipalidad pidió a la población que, quienes hayan concurrido o estado en las cercanías de la iglesia "Pueblo de Amor", ubicada en la intersección entre las calles Manuel Iglesias y Dávila, donde el religioso llevaba a cabo las actividades a puerta cerrada, se pusieran en contacto al número 107 para coordinar el relevamiento de información sanitaria. Según informaron medios locales, un conjunto de negocios de la zona, como quioscos o almacenes, tuvieron que cerrar por haber tenido contacto con el hombre cuando este realizaba las compras.

El operativo, que lleva adelante el Comité de Crisis Sanitario de la localidad para detectar los contactos estrechos, se expande por los barrios Río Tala, 1° de Mayo, y en los alrededores del Centro Integrador Comunitario. Por su parte, el religioso está aislado en el complejo del Ex Tiro Federal, con custodia policial para "que se quede ahí y no contagie a nadie más", señaló Salazar.