El conservador Jean Castex será el nuevo primer ministro de Francia, luego de que el presidente Emmanuel Macron dispusiera cambios en el Gabinete del Gobierno producto de la derrota oficial en las elecciones municipales y después de haber transitado el tramo más grave de la pandemia de coronavirus.
A primera hora de este viernes, Edoauard Philippe formalizó ante Macron su renuncia al cargo de primer ministro. El presidente la aceptó y luego anunció en una entrevista para medios locales que Castex sería el reemplazante en un nuevo período en el que pretende darle a su gobierno mayor énfasis en lo social y lo referido al medio ambiente.
Castex es un político conservador de 55 años, que es desde 2008 alcalde de Prades, un municipio de los Pirineos Orientales. Ocupó varios puestos de segundo nivel en diversos ministerios y es considerado uno de los arquitectos de la estrategia de salida de las restricciones aplicadas por la crisis de coronavirus.
A principios de abril pasado, Castex había recibido el encargo de diseñar las flexibilizaciones en Francia, lo que le obligó a dejar de lado la función que tenía, la de coordinar a las distintas administraciones implicadas en la organización de los Juegos Olímpicos de París de 2024.
De esta manera, Macron apuesta por un perfil técnico, un hombre que hasta hace unos meses apenas era conocido por el público, con el objetivo de dirigir el giro que quiere dar a su nuevo mandato en los dos años que quedan hasta las presidenciales.
Muy apreciado por su capacidad de gestión, tanto entre políticos de derecha como de izquierda, su nombramiento es interpretado como un paso al frente del propio Macron, quien optó por designar como nuevo primer ministro a un dirigente con perfil gestor más que político.
El movimiento en la cima del poder gubernamental no es una sorpresa, ya que Macron había anticipado la necesidad de una reformulación de su equipo de gobierno luego de las elecciones locales del fin de semana pasado pero, sobre todo, después de que el país atravesó, al menos la parte más grave, de la crisis sanitaria causada por el coronavirus.
Los comicios resultaron un fuerte revés para La República en Marcha (LREM), el partido de Macron, que obtuvo un resultado peor al esperado. A su vez, los medios franceses estuvieron especulando durante los últimos días con la salida del Ejecutivo de Philippe, que ganó las elecciones en la alcaldía de Le Havre, en el norte de Francia.