Nuevamente, el consumo de la carne de marmota cruda desencadenó un peligroso brote de peste negra, que obligó al gobierno de Mongolia a dictar una cuarentena estricta en la ciudad de Tsetseg, provincia occidental de Khovd. La medida fue tomada por las autoridades luego de que una pareja falleciera por la enfermedad tras ingerir al animal, según confirmó el Centro Nacional para las Enfermedades Zoonóticas (NCZD) del país en base a los tests de laboratorio realizados.
La dependencias sanitarias de la zona ya aclararon que rastrearon a las personas que tuvieron contacto con la pareja para hacerles un seguimiento ante los potenciales síntomas que pueden manifestar. "En los dos casos confirmados, se identificaron 146 individuos de primer contacto y 504 de segundo contacto, y se recolectaron y analizaron 146 muestras de primer contacto", puntualizaron.
Los medios locales sugirieron que las víctimas eran un hombre de 27 años y una joven mujer de edad desconocida, de acuerdo al Moscow Times. Ambos habrían comido carne de este roedor, provocando una infección en su organismo que terminó con su vida.
Fue tal el riesgo que generó la muerte de las dos personas que el gobierno anunció además el cierre de la frontera con Rusia para evitar que se propague la enfermedad, sumamente contagiosa, por fuera del país. Tras los decesos, se dispuso el confinamiento para la capital de la provincia y uno de los distritos de la región, a unos 500 kilómetros al sur de las repúblicas siberianas meridionales de Tyva y Altai. A su vez, a los vehículos se les prohibió temporalmente el ingreso a la región.
En mayo de 2019 había ocurrido un caso similar en la ciudad mongol de Ulgii, provincia de Bayan-Ölgi , cuando un hombre de 38 años y su mujer, embarazada, murieron por el mismo motivo. Las medidas tomadas por parte de las autoridades fueron idénticas.
Si bien la caza de este animal está prohibida en la nación, en el lugar existe una antigua tradición que indica que el consumo de la carne cruda de marmotas fortalece la salud.
Qué es la peste negra o bubónica
La peste bubónica es una infección microbiana grave ocasionada por la bacteria Yersinia pestis. Los primeros síntomas son similares a los de la gripe y se presentan de uno a siete días después de la exposición a la bacteria. Entre estos síntomas se incluye la fiebre, dolor de cabeza y vómitos. Luego, se empiezan a notar los primeros signos más severos de la infección en el cuerpo, como inflamación de los ganglios linfáticos del cuello, axilas e ingles.
En ausencia de tratamiento la mortalidad de la enfermedad puede alcanzar el 90% y con tratamiento incluso el 20% de los afectados pueden morir. Por otro lado, la enfermedad puede desencadenar en una forma aún más peligrosa: la peste neumónica, que afecta a los pulmones y que puede resultar muy contagiosa de persona a persona. La forma habitual de contraer la enfermedad es por inhalación de pequeñas gotas infecciosas diseminadas al hablar, toser o estornudar. Esta forma de la enfermedad tiene un 100% de mortalidad si no es tratada con un método adecuado, pero aún con tratamiento, la mortalidad puede alcanzar el 50%.
Los roedores salvajes son el principal vehículo de transmisión. Por eso su caza y consumo de carne está prohibida. Sin embargo, la población local se alimenta del roedor de manera frecuente pese a las advertencias sanitarias.
Si bien hoy la Peste Negra provoca 2.000 muertes cada año, se estima que eliminó entre el 20% al 60% de la población de Europa en el siglo XIV. Por eso preocupa que se asome como una amenaza más para este 2020 que ya bastantes amenazas epidemiológicas tuvo.