Paula Ormaechea se convirtió en la primera tenista argentina en regresar a la actividad tras el parate de la actividad por la pandemia de coronavirus y lo hizo en Italia, donde vive junto a su pareja, el jugador de voley Luciano Di Cecco.
La nacida en Sunchales, Santa Fe, que ocupa el puesto 264° del ranking de la WTA, volvió a jugar en un encuentro correspondiente al circuito italiano en Perugia. Tras más de cuatro meses de suspensión, tuvo un debut positivo al vencer a la local Aurora Zantedeschi (734° del mundo) por 7-5 y 7-6 (1), pero su buen andar se detuvo en los cuartos de final, etapa en la que cayó ante Stefania Rubini (-1019°) por 7-6 (5) y 6-2.
La última presentación oficial de Ormaechea había sido el 4 de marzo pasado, en el ITF de Turquía, cuando cayó con la kazaja Anna Danilina (274°).
El regreso de la sunchalense, de 27 años, se concretó una semana después de que la Federación Internacional de Tenis confirmó que Argentina y Kazajistán se enfrentarán a partir del 5 de febrero del próximo año en nuestro país por el ascenso al Grupo Mundial de la Fed Cup.