El autor del ataque de Londres se llamaba Adrian Russell Ajao antes de convertirse al islam, reveló ayer el jefe de la unidad antiterrorista de Scotland Yard, Mark Rowley, quien informó que se detuvo a otras dos personas en relación con el atentado que provocó cuatro muertos el miércoles. La precisión sobre el nombre original permite restar credibilidad al comunicado, completamente desprovisto de datos biográficos, en el que la milicia jihadista Estado Islámico (EI), reivindicó como un “soldado” propio al hombre ahora conocido como Khalid Masood, según expertos consultados por el rotativo The Independent.
Sobre los nuevos arrestos, en una rueda de prensa ofrecida delante del edificio policial, Mark Rowley dijo que los mismos fueron llevados adelante durante la madrugada en el centro y en el norte de Inglaterra y calificó las detenciones de “significativas”, al tiempo que pidió ayuda a la población sobre cualquier información respectiva al responsable del atentado. El funcionario policial precisó además que, con las dos últimas detenciones, el número de personas detenidas en relación con el atentado asciende a 9, después de que una mujer, arrestada poco después del ataque, fuera puesta en libertad bajo fianza. Rowley no facilitó los nombres de los arrestados, pero informó que se registran cinco propiedades y se allanó de otras 16, mientras que se incautó material que incluye importante información de computadoras.
Cuando fue abatido por la policía el miércoles ante el Parlamento, el agresor utilizaba el nombre de Khalid Masood, aunque las autoridades indicaron que en el pasado usó otros nombres y seudónimos.
Según el Daily Mail, era hijo de Janet Elms, quien lo tuvo de soltera y lo inscribió como Adrian Elms en el condado de Kent, sureste de Inglaterra, y poco después se casó con Phillip Ajao, quien le dio su apellido al pequeño Adrian. Al morir, Masood tenía tres hijos.
Tras revelar ayer su verdadera identidad, el jefe de la unidad antiterrorista de Scotland Yard puntualizó que la investigación está centrada en entender “la motivación, la preparación y los cómplices” que tenía Masood para llevar a cabo su ataque con un vehículo. En concreto, el agente explicó que se trata de establecer si actuó solo, se inspiró en propaganda terrorista o si contó con el respaldo de terceras personas que le hubieran animado a atentar, y pidió la colaboración de la población para avanzar con la pesquisa.
En ese marco, subrayó: “Puede haber gente que tuviera preocupación por (la actitud de) Masood pero no se sintiera cómoda, por alguna razón, en transmitirnos esa inquietud”. Sin embargo, en su vida cotidiana el atacante no parecía ser motivo de preocupación para sus vecinos de Birmingham, que lo describieron como “muy tranquilo” y parte de una “familia muy reservada”.
El atacante también había vivido en Luton, al este de Londres, con una mujer, de 39 años de edad. La policía anunció la noche del jueves que habían detenido a una mujer de la misma de edad, pero no se sabe si es la misma persona. Luton es conocido como centro de reclutamiento jihadista en Londres.
Según la policía, el atacante pasó su última noche en la habitación 228 del Preston Park Hotel, un hotel económico de la ciudad de Brighton, en la costa sur de Inglaterra. Empleados del hotel dijeron a un diario local, que “parecía agradable y educado. Era muy inglés pero de raza mixta con una gran barba”, destacaron.
Michael Peterson, otro cliente del hotel que se topó con Masood antes de partir el miércoles por la mañana, dijo que parecía “totalmente, perfectamente normal”, agregando: “Articulado, educado, presentable y el hombre en realidad está en camino para cometer un asesinato masivo”. El Estado Islámico (EI) se adjudicó la responsabilidad del ataque del miércoles, calificándolo de “soldado del Estado Islámico”, pero no estaba claro si el grupo tenía participación directa en el incidente.
En cuanto a las víctimas, el funcionario informó de que el hombre de 75 años fallecido anoche en el hospital –la cuarta víctima del ataque– fue identificado como Leslie Rhodes, del barrio de Streatham, en el sur de Londres. Además, otras dos personas permanecen en estado grave en el hospital, otra con heridas que amenazan su vida, mientras que otros dos policías permanecen hospitalizados con “heridas significativas”, según el jefe de la unidad antiterrorista. Los agentes han hablado –según Rowley– con 3500 testigos, entre ellos mil que estaban en el puente de Westminster y 2.500 delante del Palacio de Westminster, sede del Parlamento.
Además del hombre de 75 años fallecido anoche, el agresor mató al policía Keith Palmer; a la mujer de origen español Aysha Frade y al turista estadounidense Kurt Cochran, de 54. El atacante había atropellado a decenas de peatones antes de estrellar el vehículo contra el Parlamento, apuñalar al policía Keith Palmer y ser abatido a tiros por la policía.