La ofensiva para llevar la megacausa sobre maniobras de espionaje ilegal a Comodoro Py no resultó hasta ahora lo exitosa que el macrismo esperaba, aunque sigue sumando intentos. Por lo pronto el juez Sebastián Ramos pidió, como le indicó la Cámara Federal, un tramo del expediente que se investiga en Lomas de Zamora sobre la participación de la Agencia Federal de Inteligencia y de un narco llamado Sergio “Verdura” Rodríguez en un atentado con una bomba de trotyl en 2018 contra el ex funcionario José Luis Vila, pero rechazó un reclamo del fiscal Guillermo Marijuán que pretendía que todo ese expediente pase íntegro a los tribunales porteños. También otro juez, Marcelo Martínez de Giorgi, rechazó un pedido de la ex número dos de la AFI, Silvia Majdalani para que se lleve otro tramo de la causa, el que apunta al espionaje sobre Cristina Kirchner y al Instituto Patria, por lo que la ex funcionaria fue citada a indagatoria. El último intento fue de Gustavo Arribas, también convocado como sospechoso por los mismos hechos, que llevó a la Cámara Federal porteña un planteo para que se sortee un juez que pida el caso: el tocó a María Eugenia Capuchetti.
La declaración del narco Verdura fue precisamente la que ofreció las pistas que conectaban con la AFI la aparición de un artefacto armado con medio kilo de trotyl, en la puerta de la casa de Vila, ex subsecretario en el Ministerio de Defensa y ex agente de la SIDE. Declaró que el ex espía Facundo Melo lo había contactado para llevar el explosivo. Del teléfono de Melo y sus contactos comenzaron a aparecer pistas sobre otras operaciones dudosas de inteligencia. En su momento, el artefacto no explotó, porque alguien alertó y fue desactivado a tiempo. Rodríguez diría después que solo lo querían asustar a Vila.
La causa inicial sobre este ataque tramitó en Comodoro Py, en el juzgado de Ramos, pero nunca tuvo grandes avances. Nadie fue indagado por el hecho, ocurrido hace dos años. El juzgado de Lomas de Zamora le pidió la causa a Ramos, que no se opuso. El que sí protestó fue el fiscal Marijuán. El camarista Mariano Llorens resolvió que el caso quedara en Py, pero el fiscal dobló la apuesta y pidió la causa completa, con los múltiples espionajes a políticos oficialistas y opositores, organizaciones sociales, periodistas, sacerdotes, ex funcionarios y empresarios privados de la libertad.
A todo esto último, que es nada menos que la gran causa de espionaje, Ramos le dijo que no. Recordó que el propio Llorens sostuvo que “se trata de hechos escindibles”. “La inhibición debe ser propuesta respecto de los hechos que damnificaron a Vila, más no de la totalidad de la causa 14149/2020. Hacer lo contrario, conculcaría los principios del juez natural y del debido proceso con la consecuente afectación del derecho de defensa en juicio de los acusados de la buena y pronta administración de justicia”, sostuvo Ramos. Marijáun se puede oponer. También el juez de Lomas.
En relación con el espionaje, pero lo que atañe a CFK y al Instituto Patria, cuando se veía venir el llamado a indagatoria, Majdalani fue a pedirle al juez Martínez de Giorgi que reclame esa parte del expediente. Este magistrado había sobreseído tanto a ella como a Arribas, quienes adujeron en 2018 que había una amenaza de seguridad y una causa, por lo que había autos de la AFI merodeando a la ex presidenta. Ahora el juez de Lomas Juan Pablo Augé dijo que esa argumentación fue falsa, y falsos los documentos presentados. Pero Martínez de Giorgi igual rechazó el planteo de Majdalani, la “señora 8”, porque dijo que era un caso cerrado. En el juzgado de Lomas la pesquisa abarca un período más amplio y hechos que antes no se habían considerado, como el espionaje en la casa de la ex mandataria.
El último intento lo hizo Arribas y tiene final abierto. Junto con la ex funcionaria, están citados a indagatoria la semana próxima por el juez Augé. Lo que hizo fue presentar un pedido ante la Cámara Federal de Comodoro Py para que algún juez que toque por sorteo reclame todo el expediente. Le tocó a María Eugenia Capuchetti y el fiscal es Carlos Stornelli, que deberán resolver qué hacer. Tal vez pidan todo el expediente, y comience una nueva disputa.