“Soy feliz en Unión, yo me quiero quedar", respondió el delantero Franco Troyansky cuando la dirigencia le informó de una oferta por su pase. Puebla de México lo quiere a préstamo por un año a cambio de 250 mil dólares para los tatengues y pone una opción de compra de dos millones de dólares por el ex goleador de Olimpo de Bahía Blanca. Pero las conversaciones se estancaron por el desinterés del propio jugador. "Fue todo muy fácil porque yo me quiero quedar en Unión y en el club me dijeron que me quieren", asumió el delantero. El flamante técnico tatengue, Juan Azconzábal, reclama también por la continuidad en el equipo del arquero Sebastián Moyano y el zaguero central Jonathan Bottinelli. En ambos casos los jugadores deben acordar nuevo contrato con la dirigencia para jugar la próxima temporada.