Los datos preliminares que maneje el Gobierno de la provincia de Buenos Aires marcan una disminución en la velocidad de los contagios de coronavirus en el territorio bonaerense. En se marco, el viceministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, aseguró que el Gobierno provincial evalúa la posibilidad de pasar a fase dos el a partir del próximo 18 de julio.
"Por la información que tenemos hasta el momento, que es preliminar, la velocidad de ascenso de los casos se detuvo, no es que dejó de crecer sino que se acható la curva, esta subiendo todavía pero a mucho menos velocidad", detalló Kreplak.
Más allá del optimismo, el funcionario advirtió que si bien "esto no es una conclusión, nos haría pensar que puede ser que si de acá al 17 (de julio) esto se sostenga, podamos pasar de fase uno a fase dos, pero no lo podemos asumir ahora porque para eso acordamos esperar a los quince días".
Keplak aclaró que todos los datos que tienen hasta el momento son preliminares pero que igualmente permiten ver que la decisión de los Gobiernos nacional, junto con el bonaerense y el de la Ciudad de Buenos Aires, de aumentar las restricciones a partir del 1 de julio en la región metropolitana, donde se registra el mayor foco de contagio de coronavirus, hizo que la curva de nuevos casos se achatara.
"Nos faltarían dos o tres días más para saber si esta es una tendencia real, y de esa manera uno podría decir 'cumplimos el objetivo' y probablemente no se pueda seguir en la fase uno, pero tampoco estamos diciendo se redujeron los casos o paso la pandemia ni nada de eso", aseguró Kreplak al hablar por radio Continental.
El viceministro de Salud bonaerense señaló que las mayores restricciones en el aislamiento social preventivo y obligatorio provocó "una caída objetiva en la movilidad, no sólo en el transporte público sino también en los barrios y eso nos permite saber que hay menos posibilidad de contagios y si además vemos la curva, vemos que está achatándose un poco".
De todos modos, Kreplak admitió que estas restricciones "se cumplen menos que en la primera cuarentena pero mucho más que antes del 1 de julio" y agregó que desde el ministerio también "preveíamos" que esto podía pasar.
Sin embargo, dijo, el aislamiento permitió que Argentina tenga "una tasa de letalidad por debajo de los mejores indicadores mundiales, estamos por debajo de 2 a nivel país y 1,8 en la provincia, y eso se debe a que todavía no se colapso el sistema de salud. En Europa, cuando todo se complicó, la tasa de letalidad era del 10%. Por eso tenemos que sostener esta victoria".
El viceministro de Salud también se refirió a la posibilidad de se realicen en el país pruebas con vacunas contra la covid-19. "Hay varias vacunas que están muy avanzadas en su fase de experimentación", y agregó que el país fue seleccionado para realizar estas pruebas porque "tenemos un sistema de salud organizado".