“Por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial, el comercio exterior a nivel global cae a pesar de que la economía crece”, difundió días atrás la cadena inglesa BBC. La economía mundial crecería este año un 3 por ciento, pero en el primer trimestre el comercio exterior estuvo estático y en el segundo, cayó. Esa combinación se explica por un avance del proteccionismo. O sea, una reticencia para abrir las importaciones ante la necesidad proteger el empleo y cuidar la estabilidad política y social. En la Argentina de Mauricio Macri el escenario es el opuesto: ante la recesión económica y la destrucción del empleo, el Gobierno abre las importaciones de bienes de consumo, acentuando esos males. Un informe elaborado por la Federación de Industrias de Santa Fe y el gobierno provincial muestra, a nivel de producto, cómo evolucionó el ingreso de unidades importadas. La caída de las ventas junto al aumento de las importaciones de bienes de consumo está estrechamente asociado al cierre de empresas, las suspensiones y los despidos a lo largo y ancho del país.
El incremento de las importaciones de bienes de consumo no necesariamente afecta el nivel de empleo ni los salarios, en la medida que pueda darse en un contexto de crecimiento de las ventas que le permita a la industria nacional mantener su participación en el mercado local. La actividad económica creció en 2015 frente a 2014, con la coincidente suba de importaciones de bienes finales que en general se dio. Este año se produjo un derrumbe de la economía y, sin embargo, las importaciones de bienes de consumo subieron fuertemente y de manera generalizada.
En el sector electrodomésticos y línea blanca, entre enero y octubre de 2015 ingresaron 7988 unidades y este año alcanzaron las 18.768. Las planchas a vapor importadas pasaron de 54.583 a 70.789 unidades, mientras que las licuadoras importadas, de 143.693 en 2015 a 223.517 este año. Una de las principales empresas nacionales del sector es Atma, del Grupo Newsan, con planta en Campana, que despidió trabajadores a comienzos de año y suspendió a todo su personal en agosto. Además, la empresa Gafa/Electrolux redujo su plantilla de personal en 80 empleados en lo que va del año, además de suspensiones que junto a la firma Bambi (del mismo rubro) llegaron a afectar a 800 trabajadores. Las heladeras del exterior se triplicaron frente al año pasado y son más del doble que en 2014 (ver aparte). Una de las primeras importadoras es Siam, del propio Newsan, que al calor de los nuevos tiempos políticos restringió producción local en favor de las importaciones.
El calzado importado de cualquier tipo subió de 17,6 millones en 2015 hasta los 22,6 millones de pares este año. El calzado impermeable lo hizo de 10.983 hasta 31.197 pares, mientras que en calzado de cuero la importación subió de 3 hasta los 4 millones de pares desde 2014. En calzado textil, de 4 hasta los 8 millones de pares. Las partes del calzado avanzaron de unas 39 millones los últimos dos años hasta las 45,8 millones de unidades este año. Recientemente, el sindicato del calzado de Córdoba advirtió que ya se perdieron 600 empleos en 2016, el 30 por ciento de la plantilla total del sector en esa provincia. La firma Alpargatas anunció que suspenderá a 3600 trabajadores desde el 12 de diciembre y adelantará vacaciones.
Los muebles de dormitorio importados subieron de 34.890 unidades en 2015 hasta 57.900 este año, mientras que los muebles de cocina, de 26.134 hasta las 29.138 unidades. Los demás muebles, de 122.514 en 2015 pasaron a las 186.044 unidades este año. Una de las perjudicadas es la fábrica de muebles Ecomad, de Tandil, que cerró y dejó sin trabajo a 18 personas. La maderera Coama Sudamericana, de Eldorado (Misiones), despidió al menos a 50 personas este año, mientras que la firma Placas Rivadavia, de terciados y enchapados, ubicada en Dos de Mayo (Misiones), redujo su plantilla en 15 empleados y bajó las horas de trabajo a los restantes 105 empleados.
La importación de artículos de vidrio pasó de 10,3 millones de unidades a 12,9 millones, mientras que las copas para beber lo hicieron de 1,9 a 2,6 millones de unidades. “La perspectiva es el cierre”, dicen en Vitrofin, una cristalería recuperada ubicada en Cañada de Gómez (Santa Fe). Cristalería San Carlos, también santafesina y con 70 años de antigüedad, redujo su plantilla en 20 personas.
Las bobinas de papel importadas medidas en kilos subieron de 2,6 millones en 2014/2015 a 4,2 millones este año. En el sector, Papelera Tucumán echó a 60 trabajadores, Papelera Berazategui despidió a 15 empleados y en la empresa Molarsa, en Neuquén, el gremio denuncia despidos y la intención de la patronal de reducir salarios.
La importación de prendas y otros artículos textiles pasó de 21,5 millones de kilos en 2014 a 19,9 millones en 2015 a 25,8 millones este año. El sector textil registra deterioro del empleo en todo el país. En La Rioja, el gremio denuncia casi a diario despidos a cuentagotas. Cerraron las empresas Top San Juan, que fabricaba jeans para Levi´s y la planta de TN&Platex en Chaco, principal hilandería del país.
Crecen las importaciones y sube la ola de cierres y despidos en fábricas
Volver al mundo pero sin empleo
Los principales países extienden las redes de protección a su industria y crecen. Argentina, a contramano: abre la economía y retrocede.
Este artículo fue publicado originalmente el día 13 de noviembre de 2016