El presidente de Estados Unidos Donald Trump conmutó la pena a prisión de su amigo y ex asesor Roger Stone. La decisión se conoció pocos días antes de que Stone, de 67 años, comenzara a cumplir una pena de 40 meses en prisión. El histórico consultor político del partido Republicano había sido acusado de manipular testigos y mentirle al Congreso. Todo en el marco de la investigación sobre si la campaña de Trump tuvo el apoyo de Rusia para ganar las elecciones de 2016. Es el sexto asesor del presidente condenado durante la investigación por el Rusiagate. Desde el partido demócrata denunciaron que los amigos del presidente gozan de una Justicia paralalela.
"No puedo permitir este error"
Stone dijo que tenía previsto entregarse el martes, después de que un tribunal rechazara su pedido de postergar la fecha por ser población de riesgo frente al coronavirus. Pero anoche se enteró del favor que le hizo su amigo. "El presidente me dijo que había decidido, en un acto de clemencia, emitir una conmutación completa de mi sentencia, y me instó a seguir enérgicamente mi apelación y mi reivindicación", relató Stone por teléfono a la CNN. Se encontraba reunido con amigos en su casa de Fort Lauderdale, Florida. A diferencia de un perdón presidencial, que exculparía a Stone de los delitos por los que fue condenado, la conmutación de sentencia tan solo le levanta la pena.
Stone asesoró durante años a Trump y trabajó hasta agosto de 2015 en su campaña electoral. Fue detenido por el FBI en enero de 2019 en Florida. Según la Fiscalía, el asesor actuó como enlace entre la campaña de Trump y la plataforma WikiLeaks, vinculada a la filtración de correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata, que en ese momento llevada a Hillary Clinton como candidata. La justicia había encontrado culpable al amigo del presidente por haberle mentido al Comité del Congreso que llevó adelante la investigación sobre el caso. El exasesor pretendió inculpar al activista, comediante y presentador de radio Randy Credico poniéndolo como nexo con Wikileaks. También se provó que lo amenazó. Stone fue declarado culpable de los siete cargos federales y condenado a tres años y cuatro meses de cárcel en noviembre pasado.
El consultor negó haber actuado mal y aseguró que había motivaciones políticas en su contra. En declaraciones a la prensa al conocer la conmutación, agradeció a Trump por haberle otorgado el perdón. "Él tiene un gran sentido de justicia. Hemos sido amigos por muchos, muchos años, y él entiende que fui atacado estrictamente por razones políticas", afirmó el exasesor presidencial. Stone es un veterano asesor político republicano, caracterizado por su estilo provocador. Entre sus clientes estuvieron los expresidentes Ronald Reagan (1981-1989) y Richard Nixon (1969-1974). Su lema favorito es: "No admitas nada, niégalo todo y lanza un contraataque".
Justicia paralela
El presidente estadounidense había afirmado hace algunos meses que la sentencia debería ser anulada. “¡No puedo permitir este error judicial!”, escribió hace meses Trump en Twitter. Luego dejó abierta la posibilidad de conmutar la pena de su asesor. ”Me encantaría ver a Roger exonerado porque personalmente creo que se le trató muy injustamente”, declaró el presidente en febrero pasado. La investigación generó fuertes luchas internas dentro del Departamento de Justicia por la injerencia del mandatario en la causa. De hecho el fiscal general de EEUU, William Barr, emitió una recomendación en la que instaba a rebajar la pena pedida inicialmente, de 7 a 9 años. Eso provocó que todo el equipo del departamento de Justicia que trabaja en el caso renunciara. Denunciaron que estaban recibiendo presiones para que Stone fuera tratado de manera indulgente por su relación con Trump.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, emitió un comunicado en el que dijo que Stone había sido víctima del “engaño de Rusia”. “Ya ha sufrido mucho. Fue tratado de forma muy injusta, como muchos otros en este caso. ¡Ahora es un hombre libre!", sostuvo la funcionaria. El comunicado enfatizó que el amigo del presidente enfrentó una acusación, arresto y juicio injustos por lo que merecía la oportunidad de defender de nuevo su caso. "Stone, como cualquier estadounidense, merece un juicio justo y todas las oportunidades para defenderse ante los tribunales. El presidente no desea interferir en sus esfuerzos para hacerlo", explicó la portavoz.
Por su parte, la presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi dijo que la conmutación de la pena a Stone era un acto de corrupción asombroso. El presidente de la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Adam Schiff, calificó la medida de como una ofensa para el Estado de derecho. “Con Trump ahora hay en Estados Unidos dos sistemas de justicia: uno para los amigos criminales de Trump y otro para todos los demás”, dijo el demócrata. La congresista demócrata Ayanna Pressley fue contundente al calificar de despreciable la actitud del mandatario. "En marzo, envié una carta a El Ocupante de la Casa Blanca exigiendo que otorgue clemencia para salvar las vidas de nuestros hombres y mujeres encarcelados más vulnerables desde el punto de vista médico. Lo ignoró, pero encontró tiempo para conmutar la sentencia de su corrupto asociado. Despreciable", escribió Pressley en Twitter.