El departamento de Rosario donde el Che Guevara vivió sus primeros meses --incluso donde se supone que nació-- está a la venta. Desde 2002 pertenece a dos empresarios, Francisco Farrugia y Manuel de la Rica Pascual, quienes nunca lo habitaron ni alquilaron. No vivían en la Argentina cuando lo adquirieron sin tener muy claro el para qué. Los guiaban dos intenciones: preservar la memoria del revolucionario y el patrimonio arquitectónico. “Lo vendemos porque tenemos casi 70 años. Queremos colocar ordenadamente nuestro patrimonio para que nuestros hijos no se maten en una guerra civil. Somos sujetos a riesgo de la covid-19. Ya lo teníamos conversado y nos aceleramos”, cuenta a Página/12 Farrugia, desde Salvador de Bahía (Brasil), donde reside actualmente.
Farrugia nació en el municipio santafecino de Totoras. Estudió en Rosario; vivió a dos cuadras de la casa del Che. A los 20 años emigró a Italia. Vivía en Milán cuando en 2002 se topó con un aviso clasificado en el Corriere della Sera: el departamento natal de su admirado guerrillero estaba en venta. Enseguida se puso en contacto con su amigo De la Rica Pascual, quien vivía en Madrid, y concretaron la compra. Intentaron, sin mucho éxito, llevar adelante un proyecto cultural. Además, por estar dentro de un edificio el espacio no pudo volverse museo. Aunque desde hace años está señalizado y es una de las paradas dentro del "circuito del Che", para decepción de turistas y rosarinxs las visitas no están permitidas. A excepción de las ilustres.
El primer hogar del Che es un departamento del segundo piso de un edificio de estilo neoclasista francés ubicado en el corazón de la ciudad, en Entre Ríos y Urquiza. En esta edificación diseñada por el prestigioso arquitecto Alejandro Bustillo --creador del Hotel y Casino de Mar del Plata, el Llao Llao, el Monumento a la Bandera-- viven “todos los ricos" de la zona. Se levantó para la Compañía de Seguros La Rosario. La propiedad a la venta posee 240 metros cuadrados distribuidos en un área de servicio con cocina, dos cuartos y un baño; una recepción, un palier, escritorio, sala-comedor; otros tres dormitorios y un baño que se conserva original desde 1927, año en que finalizó la construcción. Coqueto, es de techos altos, grandes ventanas y piso de pinotea.
De acuerdo al sitio de la Municipalidad de Rosario no existen registros de cuánto tiempo vivió Guevara allí. Fueron "poquitos" meses, antes de que la familia se instalara en Buenos Aires y luego en Alta Gracia, Córdoba. Lo que más emociona a Farrugia es la presunción de que en una de las habitaciones, la más pequeña, habría nacido el hombre que cambió la historia. En la copia del acta de nacimiento del Che que él posee figura que llegó al mundo en ese domicilio. Pero al igual que otros datos de su biografía no está confirmado y no deja de ser parte del misterio que envuelve al mito.
“Nosotros no especulamos como dicen algunos. Nos costó más caro mantener el departamento que el valor al que lo compramos”, se defiende el empresario, uno de los realizadores de la Campus Party, evento para aficionados a la informática, la ciencia y el entretenimiento digital. Fue fundador de multinacionales en el ámbito del marketing y editor de diarios y televisión. Colaboró con Gabriel García Márquez en la fundación de la Escuela Internacional de Cine y Televisión, de La Habana. Y es socio fundador, junto al exvicepresidente estadounidense Al Gore, de una empresa que se propone estudiar “la estructura de la sociedad del futuro”. “Soy un falso capitalista. Es muy de Latinoamérica pensar que si sos comunista o tenés ideas socialdemócratas tenés que ser pobre u obrero. No podés ser un empresario de éxito y ganar mucho dinero. En Europa no es así”, se define Farrugia, quien ya en la preadolescencia admiraba al Che y graficaba ese sentimiento en pósters que empapelaban su habitación.
Al comprar, en 2002, la primera casa del Che, ambos empresarios tuvieron la intención de encarar proyectos culturales vinculados a su figura. “En la Argentina un poco se lo esconde, mientras que en Europa es considerado uno de los cinco personajes del siglo XX en Latinoamérica. La percepción de la figura histórica es mucho mayor fuera de la Argentina que dentro”, compara Farrugia. Hubo conversaciones con Roberto Fontanarrosa y Mercedes Sosa para el desarrollo de actividades para la preservación de la memoria. Pero al poco tiempo ambos artistas fallecieron y el proyecto quedó trunco. “Hubo otras iniciativas que fueron evaluadas para ser financiadas pero no se pusieron en marcha”, comenta el hombre.
De movida había una gran limitación, que ha suscitado quejas de los turistas en foros, una decepción válida: al hallarse dentro de un edificio la casa no podía habilitarse como museo. En efecto, Farrugia y De la Rica Pascual fueron advertidos acerca de esto por la anterior propietaria y el consorcio ("ricos y de derecha: los entiendo") antes de concretar la operación. El departamento sólo quedó abierto para visitas ilustres. Fue puesto a disposición de las autoridades municipales, provinciales y nacionales. Lo recorrieron Pepe Mujica, Alberto Granados, lxs hijxs del Che, uno de los hijos de Fidel Castro, Harry Villegas. El empresario recuerda que participó en la construcción del museo dedicado al revolucionario que se encuentra en La Habana. Le hubiera encantado hacer lo mismo aquí, asegura.
Antes de 2002 habitó el departamento una mujer viuda que un día supo "de casualidad" que ésa había sido la primera vivienda del Che. Ella abría las puertas a quienes desearan pasar a espiar esa intimidad cruzada con la Historia. "Pero no era como ahora que hay un cartel. Es una cosa pública y se hizo un marketing para el turismo. En aquél entonces poca gente iba. Nadie sabía que el Che había nacido ahí", explica Farrugia.
Ya hay más de 60 mil muertos --"nos caen encima"-- por covid-19 en Brasil. La preocupación lo invade, así como también la necesidad de dejar su patrimonio ordenado a sus hijos. La propiedad se vende ahora a una base de 400 mil dólares. "Lo venderemos con tres condiciones: la primera es que se mantenga el mismo objetivo. Que se respete ponerlo a disposición de visitas para autoridades. Que se conserve patrimonialmente: podés comprar una Ferrari y después no tener para la gasolina. Cuesta carísimo mantener ese departamento. La tercera cosa es quien ofrezca más", especifica Farrugia. Ya han recibido propuestas desde Rusia, Turquía y la Argentina. Continuarán escuchando ofertas hasta el 25 de este mes, momento en qué definirán en qué manos queda este pedazo de historia.