El equipo de Washington de la NFL dejará de llamarse Redskins (Pieles Rojas) y cambiará su logo por las connotaciones racistas que tenía esa denominación, informó este lunes la propia franquicia a través de un comunicado. De esa manera, el equipo respondió a las presiones que venía teniendo por parte de hinchas, patrocinadores y grupos de pueblos originarios de Estados Unidos.
Por el momento, los dueños de Washington no informaron sobre el nuevo nombre que tendrá el equipo, ya que primero deberán responder a cuestiones contractuales de marcas y registros.
El propietario del equipo, Daniel Snyder, se había apegado a la creencia de que el nombre era una "insignia de honor" y que nunca la cambiaría. Sin embargo, la presión a la que venía siendo sometido motivó que el 3 de julio se anunciara que el equipo iba a formalizar una exhaustiva revisión para ver si cambiaba o no el nombre.
Más allá de los grupos de pueblos originarios que solicitaban el cambio, la mayor presión llegó por parte de los patrocinadores, que en algunos casos indicaron que iban a considerar mantener el vínculo con el equipo si seguía manteniendo el apodo y el logo. Tanto que FedEx, la empresa de correos que le aporta su nombre al estadio donde juegan los Redskins a cambio de 205 millones de dólares hasta 2025, había puesto en duda su continuidad. Otros sponsors como Pepsi, Bank of America y Nike se unieron más tarde con sus propias declaraciones públicas.
Incluso, la plataforma Amazon había anunciado que iba a retirar todos los productos del equipo hasta que se cambiara el nombre. De la discusión generada llegó a participar el gobernador del estado de Maryland, Larry Hogan, un republicano moderado y crítico de las políticas del presidente Donald Trump, que se manifestó partidario del cambio de nombre, mientras que el mandatario estimó que la franquicia estaba evaluando el cambio de nombre sólo “a fin de mostrarse políticamente correcto”.