Film Title Poem      6 puntos

Estados Unidos, 2016.

Dirección: Jennifer West.

Duración: 67 minutos.

Estreno: en la plataforma Mubi.

Suele decirse que el cine experimental no es para todo el mundo, aunque no haya en él ninguna puerta con candado a la vista. Tal ha sido la hegemonía de lo narrativo en aquello que, por la fuerza de la costumbre, seguimos llamando film –aunque la presencia del celuloide como soporte para la proyección ya no tenga lugar en la mayoría de las salas de cine– que todo lo que no participe del mandato “contar una historia” suele quedar relegado a un nicho de iniciados. La plataforma Mubi presenta regularmente largometrajes no narrativos con mayor o menor grado de experimentación formal y ese es el caso de Film Title Poem, cuyo título puede traducirse de manera independiente (los términos “película”, “título” y “poema” aislados entre sí) o bien como una expresión, “Poesía de títulos de películas”. Esta obra de la artista plástica y eventual cineasta californiana Jennifer West es ambas cosas: una suerte de poesía integrada por títulos de películas y un objeto audiovisual donde la materialidad del film es el principal objeto de atracción.

West filmó en 35mm una gran cantidad de fotogramas donde pueden apreciarse, precisamente, títulos de películas. A ese primer paso del procedimiento le siguió la filmación de su propia mano que, linterna en mano, ilumina detalles o la totalidad de los fotogramas. Finalmente, la artista dibujó sobre el celuloide –pintando o rayando la emulsión– antes de transcribir todo a un formato digital y comenzar el proceso de edición. El hecho de que muchos de los “carteles” estén tomados de archivos digitales no hace más que sumar una capa más de cohabitación analógica y digital, como si se tratara de un particular palimpsesto de copias y operaciones entre las mismas. El montaje sigue un orden alfabético, aunque este es interrumpido en muchas ocasiones por otra clase de filiaciones: del orden de lo temático, por ejemplo, dependiendo del contenido de los films, o bien hilando oraciones con palabras sueltas de distintos títulos. La música aparece y desaparece de manera aparentemente arbitraria, aunque por momentos es posible vislumbrar la punta de un posible orden.

Dependiendo del grado de interés y/o de la cinefilia del espectador, la reacción puede acercarse al tedio o bien, por el contrario, a un extraño placer signado por los juegos visuales y el reconocimiento de cientos de películas ancladas en la memoria, desde clásicos populares como Vértigo y Tiburón hasta films pioneros en la historia del cine (de Méliès a Edwin S. Porter), pasando por alguna que otra obra experimental, títulos no tan canónicos de la era dorada del exploitation e incluso un par de largometrajes XXX. Descripto por su autora como un “montaje psíquico de mi propia historia interior del cine”, Film Title Poem es también una experiencia lúdica cuyo ámbito ideal posiblemente sea un museo, como instalación rítmica y algo psicodélica.