Los ministerios de Educación y del Interior firmaron con el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) un convenio para que las universidades usen un software que posibilita garantizar la identidad de los estudiantes al momento de ser evaluados a distancia en el contexto del aislamiento social por la emergencia sanitaria. El programa, desarrollado por el Sistema de Información Universitaria (SIU) del CIN, cruzará datos con el Registro Nacional de las Personas (Renaper) y podrá comenzar a ser utilizado por el sistema de educación superior a partir del segundo cuatrimestre. Autoridades académicas, gremios docentes y representantes del movimiento estudiantil apoyaron esta iniciativa aunque desde algunos sectores manifestaron su preocupación respecto de que no se vulnere "el derecho a la privacidad" de los estudiantes y que no se convierta en una nueva "excusa" para normalizar la virtualidad.
"Todas las universidades vamos a disponer de esta aplicación que va a estar conectada con los sistemas de información del alumnado para certificar la identidad de los estudiantes en el momento de la evaluación y para corroborar asistencia en la participación en foros o campus virtuales", explicó a PáginaI12 Delfina Veiravé, la presidenta del CIN, el cuerpo que reúne a los rectores de universidades públicas nacionales.
La iniciativa fue presentada en el marco de un encuentro virtual del que participaron el ministro de Educación, Nicolás Trotta, el secretario de Políticas Universitarias, Jaime Perczyk, el ministro del Interior, Eduardo "Wado" De Pedro, rectores de universidades de todo el país y el titular del Renaper, Santiago Rodríguez. El software, desarrollado por el Sistema de Información Universitaria (SIU), se llama Siu Qechua y cruza datos con el Renaper, que depende del Ministerio del Interior. El sistema estará disponible para 66 universidades e institutos universitarios y abarcará a 1.640.000 alumnos de grado y 117 mil de posgrado en todo el país. Lo que permite es la identificación digital de los estudiantes al momento de rendir un examen a distancia. Cada alumno deberá identificarse, antes de ser evaluado, con los datos de su DNI más una foto de su rostro.
"Es una aplicación que lo que básicamente hace es análogo a lo que pasa cuando el alumno muestra el DNI al momento de rendir un examen presencial. Sería el proceso de identificación inicial del alumno", señaló el coordinador del SIU del CIN, Guillermo Diorio.
Según explicó Diorio a este diario, al momento de tomar evaluación a distancia el docente le envía al alumno a través de esta aplicación un vínculo para que el estudiante se tome una fotografía y, a través del reconocimiento facial digital, sea validada su identidad. Este proceso permite verificar en determinado momento que una imagen del rostro de una persona se corresponde con un sujeto registrado en el Renaper.
"Es un sistema que nos va a permitir dar una seguridad a la instancia más complicada en el proceso de educación en un estado de emergencia sanitaria, que es la evaluación", observó el rector de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ), Alejandro Villar.
Desde la federación docente Fedun señalaron que acompañan esta iniciativa mientras "no se vulneren los derechos de los docentes ni de los estudiantes". "Me parece correcto que se busque un mecanismo fidedigno que valide la identidad del estudiante siempre que se respeten los derechos de todos", dijo el secretario general de la Fedun, Daniel Ricci. En la misma línea, se expresó el secretario general de la Conadu, Carlos De Feo: "Yo creo que está bien en poner a disposición distintos mecanismos que permitan a los estudiantes poder rendir exámenes y de esa forma que puedan avanzar con sus estudios. Si los estudiantes lo aceptan y les parece bien, a nosotros nos parece bien".
Con una postura crítica se posicionó la Conadu Histórica: sus dirigentes plantearon su "preocupación" y se declararon "en alerta" para que "no se vulnere la privacidad de los docentes y estudiantes". "El movimiento estudiantil tendrá que hacer sus cuestionamientos y aportes para que no vulneren el derecho a la privacidad de los datos personales", indicó la secretaria adjunta de Conadu Histórica, Claudia Baigorria.
Desde el movimiento estudiantil, el consejero superior de la UBA por la minoría Santiago De Lojo (La Cámpora) opinó: "El tema de las evaluaciones finales es un gran problema. En general toda la cursada virtual tiene problemas. Pero el problema que tiene la toma de finales virtuales es esto de identificar a los estudiantes. Con lo cual, esta aplicación me parece oportuna porque viene a resolver un problema que además es central para lo que es el recorrido académico, si no, se termina generando un cuello de botella".
El presidente del centro de estudiantes de la Facultad de Ciencias Económicas (UBA), Tomás García (Nuevo Espacio) señaló que este nuevo instrumento de validación de la identidad "ayuda a los que tienen buena conectividad y acceso a internet y dispositivos tecnológicos. En este contexto sabemos que hay muchos estudiantes que quedan fuera de la cursada sin poder rendir de manera virtual. Me parece bien que el Gobierno habilite esta aplicación, todo suma, pero también hay que garantizar que más estudiantes puedan acceder a rendir de forma virtual y sabemos que eso no es así, porque hay muchos que no cuentan con las condiciones", destacó.
Lucía Tovar (PO), presidenta del centro de estudiantes de la Facultad de Ciencias Veterinarias (UBA), reclamó que la aplicación del software de identificación "no sea una excusa para tomar como una normalidad a la virtualidad y terminar reemplazando la cursada presencial por una virtual que no va a tener la misma calidad, lo que además llevaría a una precarización y a una exclusión de un gran sector".