El diputado macrista Fernando Iglesias se hizo eco de una publicación antidemocrática en Twitter, donde ya está acostumbrado a quedar en offside. El diputado dio retweet a un mensaje que muestra la foto de una ametralladora con una frase por encima que señala: "Es hora de guardar las cacerolas". Finalmente, se desligó del mensaje y atribuyó su actividad en la red a un error al momento de "apretar el botón".
Más allá de sus habituales provocaciones, esta vez el exabrupto de Iglesias fue interpretado en las redes sociales como una "grave incitación a la violencia" y un "comentario golpista". Algunos inclusive llegaron a pedirle que renuncie a su banca en la Cámara de Diputados.
Según trascendió, sus mismos compañeros de bancada lo presionaron para que eliminara la publicación. Fue entonces cuando el diputado hizo un particular descargo: negó haber querido retwitear el mensaje y aclaró, en mayúsculas, "esta cuenta no acepta incitaciones a la violencia".
Según explicó, había intentado repudiar la publicación pero se equivocó. Los usuarios no le creyeron y lo burlaron diciendo que era una excusa similar a la que usan los alumnos con sus profesores cuando dicen que "el perro se comió la tarea".