En el último cuarto de hora, San Lorenzo resolvió un partido bastante más complicado de lo que indica el 3-0 final. Quilmes plantó dos líneas de cuatro bien cerradas en su propio campo y apostó al empate en cero sin ponerse colorado. Pero la resistencia cervecera se desplomó en los 15 minutos finales. Cerutti con un derechazo cruzado a los 31 del segundo tiempo, Avila, luego de meter dos enganches en el área a los 33, y Blandi en el descuento, tras una rápida escapada del propio Avila, anotaron los tres tantos que aliviaron al Ciclón tras la derrota ante Godoy Cruz en Mendoza y mucho más que eso: lo pusieron, con un cotejo más, en la misma línea de Boca en la punta de la tabla.
Que San Lorenzo haya demorado 75 minutos en quebrar a un Quilmes que sólo quiso defenderse y nada más que eso da la pauta de qué lejos estuvo lo suyo de ser brillante. Le costó encontrar el juego interno para demoler la muralla de camisetas blancas que lo esperaron sin remedio y cuando decidió ir por las puntas, con Angeleri y Cerutti por la derecha y Rojas y Botta por la izquierda, se reiteró en centros y pelotazos cruzados que simplificaron el trabajo de la defensa quilmeña. Fernando Belluschi volvió a ser el hombre más claro. Pero le costó encontrar delante de él quienes lo interpretaran adecuadamente. La mayoría se dejó ganar por la ansiedad que bajaba de las tribunas a medida que pasaba el tiempo. Y así le fueron saliendo las cosas.
La expulsión de Matías Sarulyte a los 12 minutos del segundo tiempo afirmó a Quilmes en su obsesión defensiva. Y el ingreso de Ezequiel Avila por Bautista Merlini, a los 19, le dio al ataque azulgrana la velocidad que necesitaba para quebrar a un equipo que, con un hombre menos, se aferró al cero como si no hubiera mañana. En eso estaba cuando el gol de Cerutti convirtió en inútiles todos sus esfuerzos. El tanto de Avila, tres minutos más tarde, terminó de asegurarle el destino de los tres puntos a San Lorenzo, y el de Blandi, en la última pelota, fue el cierre inmejorable de una noche que acabó mucho mejor de lo que empezó.
Mientras trata de enderezar su marcha en la Copa Libertadores , San Lorenzo no descuida el torneo local. Ayer alcanzó la punta con más contundencia que buen fútbol. Ya llegará el momento de volver a jugar bien.