Nadie atinó en el PRO a decir si se le soltó la cadena o si simplemente dijo en público lo que muchos intendentes del espacio piensan en privado. Lo cierto es que el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, dijo: “Que se alienten movilizaciones democráticas no me parece mal. Sí me parece mal cuando alguien desde su casa desde skype y con una copa de malbec opina de todo”. Muchos interpretaron que aludía a la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, que en una oportunidad fue detenida por un control de alcoholemia de la Policía porteña y le dio positivo. Valenzuela se apresuró a aclarar que no había querido referirse a ella, pero ya era tarde: la polémica estalló en las redes y se sumó el legislador porteño Leandro Santoro, quien dijo que Bullrich "salía borracha de los restaurantes y decía que el que quiera andar armado, que ande armado". Bullrich le respondió a él, pero no a Valenzuela.
Valenzuela, al igual que Jorge Macri (Vicente López), Guillermo Montenegro (Mar del Plata) y Néstor Grindetti (Lanús), forma parte del grupo de opositores con responsabilidades de gestión que no termina de tragar el estilo de la presidenta del PRO que azuza permanentene la confrontación con el oficialismo. Sus palabras, no obstante, fueron recibidas con frío entre los otros intendentes. Entre otras cosas que escuchó este diario, señalaron que era un "golpe bajo", que "se cortó solo" y que esas diferencias no se dirimían así.
Valenzuela, en tanto, salió a aclarar que jamás había mencionado a Bullrich en las declaraciones que hizo en FM Futurock: "Fue una frase genérica que responde a mi visión de destacar el trabajo territorial y de gestión en este momento de pandemia", indicó. "No fue dedicada a nadie en especial. A Patricia la valoro muchísimo por su liderazgo político y partidario y la impronta que le otorgó al ninisterio de Seguridad en la etapa de Mauricio Macri. Impronta que estamos extrañando especialmente por la coordinación que logró en aquel momento con las fuerzas federales en la provincia de Buenos Aires. Estamos trabajando unidos en Juntos por el Cambio”, planteó Valenzuela. En el reportaje radial, en cambio, afirmó: "Tenemos una manera de trabajar menos opinadora y más práctica y tenemos que dialogar. El que tiene un liderazgo partidario le habla al electorado, nosotros tenemos que gobernar”.
El legislador porteño Leandro Santoro se sumó a la polémica al afirmar que Patricia Bullrich "salía borracha de los restaurantes y decía que el que quiera andar armado, que ande armado".
Luego aclaró su posición, pero la polémica en las redes ya estaba instalada. Y Bullrich le contestó a él (pero no a Valenzuela): "Que los asesores del presidente discutan lo que digo en vez de preocuparse por la inseguridad habla más de ellos que de mí".