Tres fiscales de la Agencia de Criminalidad Organizada acusaron ayer a cinco personas de conformar con otras tantas prófugas, una asociación ilícita basada en la extorsión. Los fiscales matías Edery, Luis Schiappa Pietra y Gisela Paoliccelli imputaron ayer a Maximiliano "Cachete" Díaz de obtener dinero extorsionando a sus víctimas con represalias armadas. Casinos ilegales, y hasta comerciante que podrían tener algún negocio filo ilegal, fueron sus víctimas. Algunas de esas maniobras involucraron a la asociación ilícita en la gerencia y explotación de negocios ilícitos, entre ellos el de la quiniela clandestina y los llamados “casinos” ilegales. Su esposa Flavia Broin fue acusada de recaudar dinero. Mientras el policía retirado Alejandro Torrisi fue acusado de administrar un sistema de captación de juegos de azar sin contar con la autorización que funcionaba en una casa ubicada en Comandante Espora 229 de Villa Gobernador Gálvez, al menos hasta el 20 de julio de 2020.
Este sistema de juego consistía en nueve computadoras donde corría un software de juegos de azar a cambio de dinero. La calificación legal por la que fue acusado es la organización y explotación de juego ilegal. También un dominicano Otniel De León Almonte fue acusado por haber tirado la noche del asesinato en el Casino City Center, en el marco de una extorsión. también acusaron a José Sebastián Perlo de conformar conjuntamente con Leonardo Peiti, Damián Díaz, Hernán Quinteros (alias Chema) y Claudio Humberto Ricaldes (alias Cadi) y Mariano Ruiz -financista y lavador de dinero de Los Monos - una asociación ilícita. Sobre este último nombre -quien está prófugo - se detectó que adquirió dos bares sobre avenida Pellegrini al 1600, La Mansa y La Brava, donde concretaban las extorsiones.
Según describieron los fiscales la asociación ilícita contaba con la siguiente estructura: el organizador de la misma fue Cachete Díaz. Un primer grupo de personas comunicaba mensajes intimidatorios a las víctimas o presentándose directamente ante las personas. Un segundo grupo se encargaba de llevar a cabo los hechos intimidatorios contra la integridad física de las ocasionales víctimas. Un tercer grupo se encargaba de administrar el dinero obtenido de forma ilícita y hacerlo circular. La asociación contaba con un cuarto grupo que tuvo como tarea involucrarla en los negocios ilegales de “quiniela” clandestina y casinos ilegales. Además los miembros de este grupo prestaban colaboración para obtener cobertura institucional en agencias policiales y/o judiciales a los integrantes de la misma.
Puntualmente Cachete Díaz se encargaba de comunicarse directamente o por mensaje de Whatsapp con las personas a las que se le exigía el pago de dinero, invocando su vínculo con Guille Cantero. En esta linea el acusado se presentó el 8 de agosto de 2019 en la casa de Rodrigo Fabiani y le solicitó le entregue una camioneta marca Toyota modelo Hilux de su propiedad y la suma de 30 mil dólares a cambio de no atentar contra su vida. La banda lo acusó de haberse quedado con el dinero de "Diente de lata", un narco de Tablada asesinado.
díaz también fue acusado de acordar con Damián Escobar el ataque a tiros en enero del City Center Rosario en el que perdiera la vida Enrique Encino. Justamente el 8 de enero de 2020 en compañía de su hermano Damián Díaz envió a dos personas menores a solicitarle a Pablo Fortuny - titular de una financiera ubicada en Entre Ríos al 700- la suma de tres mil dólares y luego de ello se encontró con éste en un bar de calle Río de Janeiro y Mendoza donde le exigió la entrega de esa suma de dinero para no disparar contra su local. también Cachete fue acusado de haber interceptado el 12 de agosto de 2019 en calle Valparaíso y Rioja a Lautaro Baruffa e invocando su vínculo con la familia Cantero le exigió dinero a cambio de no atentar contra la vida de su familia.
Para los fiscales, Torrisi, ex Director de la Policía de la Provincia de Santa Fe, es el encargado de brindar auxilio a los integrantes de la organización cuando estos caen detenidos.
En ese rol el 9 de enero de 2020 en oportunidad de la detención de Ricaldez y Quintero es contactado por Leonardo Peiti para que se comunique con Cachete Díaz a los fines de procurar dar algún beneficio ilícito a dos personas de la organización que habían sido detenidas. En su carácter de policía retirado gestionó ante la comisaría 21 beneficios para lograr la liberación de Quintero y Ricaldez, detenidos ese día cuando se disponían a realizar un atentado contra el City Center Rosario. En ese rol tuvo comunicaciones con Díaz y Peiti y es el encargado de administrar negocios ilícitos relacionadas al juego clandestino.
Para los fiscales Cachete díaz se encargaba de la explotación y administración de salas de juego clandestinas. Por su parte su compañera Flavia Rocío Brión se encargaba del manejo del dinero recaudado con las maniobras extorsivas. En ese rol la acusaron de haberse presentado en el bar de San Martín y Montevideo, propiedad de Jorge Paz, para retirar el dinero de las extorsiones. En esa línea está acusada de retirar los pagos de los casinos clandestinos que pertenecen a Díaz.
Otro de los acusados de ayer es Otniel De León Almonte, alias Dominicano quien para los fiscales oficia de sicario. así el 11 de enero de 2020, cumpliendo órdenes de Maximiliano Díaz, se encuentra con Claudio Humberto Ricaldez alias Cadi, y este último le hace entrega de un arma de fuego tipo pistola, la cual Otniel utiliza posteriormente para disparar contra el Casino City Center de Rosario, provocando la muerte de Enrique Encino. Asimismo, cumpliendo órdenes de Cachete Díaz, realiza diversas acciones tendientes a localizar a Carlos Alberto Victorino “Betito” Godoy a los fines de darle muerte.
Por su parte otro integrante de esta asociación es Leonardo Peiti -un nombre conocido y ligado al juego clandestino- tiene vínculo directo con el organizador de la asociación ilícita. Cumple el rol de identificar a potenciales personas para que luego sean objeto de extorsiones por miembros de la asociación. Además es quien se relaciona con integrantes de las fuerzas de seguridad o agencias judiciales a los fines de obtener de ellos algún beneficio lícito, ilícito o delictivo, para los miembros de la organización. Cumpliendo con ese rol el 9 de enero de 2020 en oportunidad que Ricaldez y Quintero fueron detenidos se contactó con Torrisi para que intercediera en su favor. Además le envía el contacto telefónico de ese ex policía a Cachete Diaz. Y aquí viene un dato revelador: la primera quincena de la feria judicial de Enero, precisamente el día 10 de enero de 2020, Peiti se contactó con un funcionario fiscal o su empleado, que cumplen funciones en una dependencia Fiscal de la Fiscalía Regional II del Ministerio Público de la Acusación, a los fines de obtener información y algún beneficio lícito y/o ilícito para favorecer a Quintero y Ricaldez. Perlo fue acusado por participar de las extorsiones reuniéndose con las víctimas para exigirles dinero y poner a su disposición teléfonos celulares a través de los cuales se enviaban mensajes y se realizaban llamadas a las víctimas.