El Concejo Deliberante de Olavarría llevará mañana al recinto al intendente. El jefe comunal, Ezequiel Galli (Cambiemos), deberá responder más de 300 preguntas sobre la organización y el acuerdo con la productora del concierto del Indio Solari en esa localidad, que tuvo lugar el sábado 11 de marzo y que finalizó con dos muertos, heridos y desmanes.

La semana pasada los concejales aprobaron por unanimidad convocar al intendente, de 36 años, para responder sobre el papel que tuvo la ciudad en el recital que congregó a más de 200 mil personas en una localidad donde viven cerca de 80 mil. El público, procedente de distintos puntos del país, denunció la falta de controles antes, durante y después del show en el que hubo amontonamientos de personas que debieron ser auxiliadas por la Cruz Roja. Tras el recital, dos hombres que habían sido rescatados del campo y hospitalizados fallecieron por causas que continúan siendo investigadas. Otras doce personas debieron ser hospitalizadas.

La interpelación de Galli por parte del Concejo Deliberante será mañana, a las 20.30, en el salón Rivadavia del cuerpo legislativo. Los concejales además acordaron crear una comisión investigadora respecto de la organización, desarrollo y seguridad en torno al recital. Por su parte, la Cámara de Diputados bonaerense aprobó pedidos de informes al Gobierno provincial por ese recital. Los legisladores Pablo Garate (Frente Renovador), Marcelo Torres y Fernando Navarro (FpV) y Mónica Scholtthauer (Frente de Izquierda) pidieron conocer distintos aspectos relacionados con el desarrollo del show. 

La lista de trescientas preguntas que los concejales prepararon sobre los hechos ocurridos el 11 de marzo incluye puntos como la organización de la salida del público del recital, el control de los puestos de venta callejeros, la venta de alcohol fuera de la norma provincial, el control del tránsito, la utilización de espacios públicos para vender bebidas y comidas, la relación de la Municipalidad con la productora y el contrato entre ambas partes. En este sentido al intendente Galli se le cuestiona fuertemente el canon de 300 mil pesos, que muchos consideran "irrisorio", y también haberse hecho cargo del mejoramiento del espacio donde se presentó Solari. Los ediles coinciden en criticarle la decisión de poner al Municipio como fiador de las obligaciones que la productora asumía respecto del predio La Colmena, que está en concurso de acreedores, bajo custodia judicial.