El despliegue de las Fuerzas de Seguridad Federales en el conurbano bonaerense arrancó ayer en ocho municipios, luego del pedido realizado por varios intendentes ante el crecimiento de los índices de inseguridad en medio de la flexibilización del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio.
El operativo de “coordinación” entre la Nación y la provincia de Buenos Aires sumó este viernes 500 efectivos por turno. A partir del lunes el despliegue contará con tres mil agentes, entre gendarmes y prefectos, que trabajarán como complemento de la labor que realiza la Policía Bonaerense. "Vamos a ir sumando lugares a pedido del gobernador Axel Kicillof y a quedarnos hasta que la provincia lo necesite”, sostuvo el secretario de Seguridad nacional, Eduardo Villalba, y ratificó que el despliegue se realizará “sin importar el color político” de los jefes comunales.
El operativo de las Fuerzas Federales comenzó este viernes en los distritos de Avellaneda, Quilmes, La Matanza, Almirante Brown, Moreno, Esteban Echeverría, Florencio Varela y Lomas de Zamora. “Esta coordinación se basa en nuevos operativos a pedido de Axel Kicillof. Estamos en ocho distritos, y seguiremos sumando lugares", explicó Villalba. Al tiempo que sostuvo que el ministro de Seguridad bonarense, Sergio Berni, es "quien decide a dónde irán las Fuerzas Federales" en base a los planteos que realicen los jefes comunales.
El ministerio de Seguridad Nacional que conduce Sabina Frederic destacó que se trata de una "nueva etapa de coordinación entre las Fuerzas Federales y la Policía de la Provincia de Buenos Aires". Los trabajos "complementarios" se llevarán a cabo "a partir de mapas interactivos de conflictividad y delito", pero "siempre bajo la indicación geográfica que defina la Provincia", detallarón desde esa cartera a través de un comunicado.
"Además, se inició un redespliegue de fuerzas de seguridad que están en la provincia para hacer un uso más eficiente y focalizado en los puntos sindicados como más conflictivos por la Provincia de Buenos Aires y un refuerzo complementario con trabajadoras y trabajadores de destacamentos móviles de Gendarmería", añadieron desde le ministerio de Seguridad de la Nación.
El operativo comenzó en ocho municipios gobernados por el Frente de Todos, por lo que Villalba salió al cruce de los cuestionamientos de algunos de los intendentes de Juntos por el Cambio, sobre las prioridades que asignan las autoridades al despliegue de los federales.
“Esto es progresivo, éstos son los primeros ocho distritos. La semana que viene vamos a sumar más distritos, entre los que está Lanús (Néstor Grindetti). Hablé con (Julio) Garro (La Plata), con (Diego) Valenzuela (Tres de Febrero). Tratamos de tener diálogo con todo el mundo. Los distritos van a tener la seguridad que se planifique de acuerdo a lo que el gobernador nos pida, sin decidir de acuerdo al color político”, ratificó el funcionario nacional.
En declaraciones radiales, Villalba precisó que se planificó el despliegue de "un total de 3 mil agentes federales en el conurbano" y señaló que los uniformados realizarán "distintas tareas, según el lugar: operativos dinámicos, de control vehicular, y habrá grupos caminando adentro de los barrios".
Villalba también buscó minimizar y poner paños fríos a la tensión permanente entre Frederic y Berni ante las diferencias sobre el abordaje de las políticas de seguridad. Afirmó que “no son verdades esos detalles” que trascendieron en el duro enfrentamiento que ambos ministros tuvieron el miércoles en la gobernación bonaerense, mientras se discutía la implementación del desembarco de las fuerzas federales en el Gran Buenos Aires.
"Hoy son anécdotas, porque lo más importante es cómo estamos trabajando. La relación (con Berni) es de trabajo. No tenemos que tener más relación que eso, porque eso es lo que nos están pidiendo. Somos funcionarios: hoy estamos, mañana no estamos, por lo que tenemos que trabajar en el momento en el que estamos", concluyó el secretario y segundo en jerarquía de la cartera que conduce Frederic.