“Vi una italiana que me gustó muchísimo. Trata de una familia de Sicilia que se muere de hambre, allá por 1920, y que quiere huir de la mafia siciliana. Se va a Nueva York pero allá encuentra la réplica de la mafia. Y crece la historia de la familia a lo largo de los capítulos”, describe Leon Arslanian en referencia a La vida prometida. “Un dato importante es que tiene ocho capítulos, que es mi techo”, sincera.
La parte italiana
Cuando se estrenó, Página/12 la presentó como una de las sagas sobre famiglias dedicadas al crimen organizado que no han dejado de reproducirse desde que Los Soprano volvió a poner en primera plana el subgénero. Esta serie, transmitida por la señal Europa Europa, transcurre en gran medida en los Estados Unidos durante la década del 20, los años de la infame Ley Seca, y tiene como protagonista a Carmela (Luisa Ranieri), una mujer siciliana que llega a la tierra prometida a “hacerse la América”. Recientemente viuda, su vida comenzará un nuevo calvario cuando Vincenzo, el responsable de la muerte de su esposo, consiga dar con su paradero luego de tocar a sus “contactos” en el Nuevo Mundo.
La parte española
También quedó cautivado con Merlí , más extensa. “Una de las mejores cosas que vi, excelente, un personaje fantástico ”, acota. Merlí Bergeron es el carismático protagonista de una serie catalana que tuvo un paso súper exitoso en TV3, donde se estrenó, y luego por el resto del mundo hispano, a partir de su emisión en Netflix a fines de 2016. Merlí es un profesor del Instituto Àngel Guimerà, colegio secundario donde un grupo pequeño de adolescentes pasa las horas cruciales de su vida. Es un profesor distinto, un poco salvaje, lúcido, que va contra las reglas. Y es además profesor de Filosofía, algo que encarna de manera total: en clase pueden conversarse los temas más diversos y siempre serán abordados desde una perspectiva teórica nueva. Esta tendencia a obligarlos a pensar ocurre también afuera del aula: los chicos recurren a él para conversar de sus conflictos, sus dilemas amorosos, familiares, vitales y los enfoques adoptados por Merlí siempre los invitan a pensar por fuera de la norma, en muchos casos directamente a la rebelión.
Pero Merlí no es la única producción española elegida por Arslanian. "También disfruté mucho de La otra mirada”, dice. La serie retrata la vida de las mujeres, y las muestra invisibilizadas, en la Sevilla de los años 20, en una “academia de señoritas”.
La parte heterodoxa
Poco ortodoxa
, la historia de una mujer judía que escapa de la comunidad ortodoxa y de un matrimonio convenido por su familia, es finalmente la última de las series que más atraparon al jurista. En esta no está solo, además de con los miles que la hicieron subir al tope de las preferidas de Netflix en la Argentina, Arslanian comparte su elección con Alberto Fernández, que también la señaló
cuando Página/12 le preguntó por sus series favoritas.