Los memoriosos recordarán al Dante Panzeri de la televisión en blanco y negro como un señor calvo, de saco y corbata, con anteojos de marco grueso, adusto y eventualmente cascarrabias. Además de eso, Panzeri fue un periodista ejemplar por lo riguroso, iconoclasta, independiente e insobornable. Según otros, un amargado, un contreras, un intragable. Después de años de silencio (Panzeri murió en 1978, momento hasta el cual ejerció el periodismo deportivo), en la década pasada quien fuera director de la revista El Gráfico reflotó, gracias a la publicación de dos libros. Uno de ellos fue una antología de artículos; el otro, una reimpresión del único que este crítico implacable -un pelado con actitud punk, según el periodista Andrés Burgo- publicó en vida, titulado con el que es seguramente su concepto más famoso: Fútbol, dinámica de lo impensado. El editor de este último, Sebastián Kohan Esquenazi, dirige ahora este documental, que como su título indica se lanza a redescubrir a una figura seguramente ignorada por las nuevas generaciones de futboleros.
Con una narración que oscila entre la primera persona, la tercera y el relato coral, Kohan Esquenazi recorre mil y un archivos en busca de artículos, fotos, videos grabados. De estos últimos, presuntamente localizables en el Archivo General de la Nación o en las videotecas de la Televisión Pública o Telefé, encuentra uno solo, producto del consabido descuido nacional por la preservación documental. En él se ve a Panzeri despotricando contra uno de sus blancos favoritos, la dirigencia de futbol, en medio de rayas horizontales y problemas de señal. Fotos, Kohan Esquenazi encuentra una buena cantidad, y artículos un montón: existe una Biblioteca Dante Panzeri, que cuenta con once cajas conteniendo originales de sus notas. Lamentablemente sería muy aburrido ponerse a leerlas en cámara, pero el director se las arregla para volcar varios párrafos en off.
Algunas anécdotas son proverbiales. Su renuncia a la dirección de El Gráfico cuando Aníbal Vigil, uno de los dueños de la editorial Atlántida, quiso imponerle la publicación de una columna a cargo del Ministro de Economía, Álvaro “El Chancho” Alsogaray. O la tapa del último número que dirigió, dedicada al semidesconocido Antonio Báez, que había dejado el fútbol diez años atrás. O la publicación de un recuadro en blanco, en la misma revista, donde debería haber ido una foto de un equipo de fútbol, porque en ella aparecía el técnico y Panzeri consideraba que los directores técnicos no debían estar en las fotos. Panzeri era de la idea de que el fútbol eran los jugadores, y por lo tanto estaba en contra de toda táctica. Defendía el fútbol clásico y abjuraba de los sistemas especulativos importados de Italia a comienzos de los '60. Calificó al todopoderoso presidente de Boca Juniors, Alberto J. Armando, de ladrón, y al día de hoy (o de apenas ayer), Carlos Salvador Bilardo prefiere no hablar de él por las cosas que le dijo.
En este documental con cabezas parlantes (aunque no exactamente de cabezas parlantes), Kohan Esquenazi tiene el buen gusto de darle la palabra a algunos periodistas deportivos que no son parte del establishment, como el escritor Alejandro Caravario (que escribe en la revista online Un Caño), el Ruso Verea, Carlos Ulanovsky o el colaborador de Página/12 Daniel Guiñazú. También al filósofo Tomás Abraham, que como todos recuerda la extremada seriedad, el enojo a veces, de quien hacía un culto de valores como la decencia, el descontento y la impopularidad. Para completar el retrato tal vez habría que haber admitido que fue un gorila de aquellos (“A partir de 1945, el país perdió la personalidad ética y estética que lo había definido” y “La Revolución [la Libertadora] puso término a una larga noche de la vida argentina”, dijo en un par de ocasiones). Pero bueno, todo no se puede.
BUSCANDO A PANZERI 7 PUNTOS
Argentina, 2020
Dirección: Sebastián Kohan Esquenazi
Guión: Juan Villegas y S. Kohan Esquenazi
Duración: 69 minutos
Estreno en http://www.puentesdecine.com