El alcalde de Nueva York,Bill de Blasio (foto) presentó el plan de la ciudad para la reapertura de las escuelas públicas, que combinarán clases presenciales y a distancia, pero adelantó que los estudiantes no volverán a los colegios si la tasa de pruebas positivas llega al 3 por ciento en la ciudad. 

La Gran Manzana lleva por debajo de ese porcentaje desde principios de junio y actualmente, alrededor del uno por ciento de las pruebas que se efectúan cada día resultan positivas, según la media de siete días, que es la que se tendrá en cuenta. El plan de Nueva York es que a partir de septiembre cada alumno vaya a clase entre uno y tres días a la semana con el fin de facilitar el distanciamiento social, mientras que el resto de jornadas las seguirán desde sus hogares. 

Además, se limitará el movimiento dentro de los edificios, se requerirá el uso de mascarillas y se mantendrá a los estudiantes en grupos reducidos con el objetivo de limitar el riesgo de contagios. Al personal docente se le pedirá que se someta a pruebas gratuitas del coronavirus antes del inicio del curso y se le recomendará participar en un programa de test mensuales. 

En caso de que se registren uno o dos positivos en un grupo, el protocolo prevé que esa clase se cierre durante 14 días y que todos los alumnos y maestros se sometan a una cuarentena de dos semanas, en la que los estudios continuarán desde casa. Con más de 1.800 centros y más de un millón de alumnos, Nueva York tiene el mayor sistema de educación pública de Estados Unidos