A la lista de policías de Pedro Luro, Mayor Buratovich y Bahía Blanca sospechados de haber encubierto la desaparición forzada de Facundo Astudillo Castro, según los abogados de la madre del joven, ahora se suma un funcionario del municipio de Villarino que habría elaborado un "informe trucho" que permitió introducir en la investigación a la testigo que dijo haberlo llevado hasta Bahía Blanca. "Denuncié al secretario Martín Pacheco porque hizo un informe trucho con el cual algunos medios locales volvieron a poner en duda los testimonios de nuestra querella, ese documento dicen que lo enviaron a la fiscalía en forma errónea pero ya no creo más en las equivocaciones cuando terminan exculpando a la Policía Bonaerense", dijo a Página12 el abogado de la familia, Leandro Aparicio.
Por otra parte, el municipio de Villarino aprobó la oferta de una recompensa a quien aporte datos sobre Facundo, una iniciativa que los organismos internacionales sobre desaparición forzada de personas consideran como la puerta de ingreso de pistas falsas a las investigaciones de este tipo.
Desde el municipio de Villarino, el abogado Sebastián Martínez se defendió diciendo que ese tipo de informes que leen las patentes de los vehículos son imposibles de ser alterados. "Es un sistema que no puede ser manipulado", dijo el letrado a radios de la zona. Tras cuestionar que el municipio pague los honorarios de este abogado penalista, cuando debiera hacerlo el funcionario acusado en forma particular, Aparicio detalló que la municipalidad emitió dos informes, uno el 13 y otro el 14 de julio. "El primero lo firmó el apoderado, y el otro lo firma Pacheco y a ese casualmente le faltan le faltan datos, un informe erróneo que fue usado dos veces para distorsionar la realidad y crear dudas sobre los testimonios que indican que Facundo estaba subiendo a una camioneta policial. Buscan marcar que esos vehículos no pasaron ese día y sí pasaron, tal como consta en el primer informe que mandó el mismo municipio", explicó.
Martínez dijo a una radio local que desde el municipio "no tenemos intenciones de adulterar pruebas. Si una patente no aparece, se duda de determinada información pero de ahí a hablar de encubrimiento hay un mundo de distancia. A la querella no le sirven las pruebas que no van acordes a sus intereses, es un exceso que nos acusen porque no tenemos ningún interés creado en contra del esclarecimiento de lo que pasó". En un comunicado, el municipio de Villarino expresó: "Ante los trascendidos en la prensa y el pedido de aclaración a la justicia, la Fiscalía Federal determinó que no existe imputación alguna respecto de funcionarios del Municipio de Villarino en la investigación en curso por la desaparición de Facundo Astudillo Castro".
Aparicio replicó: "Si fue un error que lo expliquen ellos, pero nosotros ya los denunciamos". En el segundo documento, además, aparece el paso del auto de la testigo que dijo haberlo llevado a Bahía Blanca, cuestionada por la familia por haber sido "ubicada" por los mismos policías que lo pararon aquella mañana. “Esa mujer declaró dos veces ante la Justicia y, según el lector de patentes, el 30 de abril, a las 16.30, no pasó por ahí”, dijo Aparicio, y agregó que "a esta altura estamos hablando de más de diez personas, una asociación ilícita para encubrir". Pacheco ocupa el cargo de secretario de Protección Ciudadana en esa municipalidad.
"Se cae lo que sigue diciendo (el ministro de Seguridad Sergio) Berni, porque según el informe oficial el auto de los tres testigos nuestros pasa por el control ese día, y el auto de la persona que dicen que dijo que lo llevó no pasa ese día (30 de abril). Lo metieron dos tipos de civil que son de Villarino, uno es el secretario de Seguridad, ya pedí la detención. Tenemos ya 12 personas para pedir que vayan presos por el encubrimiento", expresó el letrado en diálogo con este diario.
Aparicio anticipó que la causa tendrá inminentes definiciones. Consultado sobre los resultados de los peritajes pendientes, dijo que "el perro adiestrado de Herrero no marcó en el auto blanco en el que la policía Siomara Flores dijo haberlo llevado, pero sí marcó en uno de los patrulleros secuestrados, y resulta que el 8 de mayo Flores desactiva el WhatsApp de su celular, otra casualidad".