El desembarco francés del ex presidente Macri con su esposa Juliana Awada y su hija Antonia mereció el inmediato repudio de buena parte de la comunidad argentina en Francia que ya programó una manifestación de repudio para el próximo lunes. Pero esa no es por ahora su principal preocupación. En primer lugar porque ese día no estará en Paris. En segundo lugar, pero más importante que el primero, porque más le preocupa el fastidio que su salida de la Argentina despertó en "círculos amigos", que se ensañaron exhibiendo el hotel que tenía reservado para su paso por Paris, La Reserve, uno de los más exclusivos y caros de la capital francesa.
Hasta el diario La Nación le dedicó una pormenorizada crónica a las bondades del lujoso alojamiento, destacando que está ubicado en un "magnífico edificio del siglo XIX que fue construido en 1856 por el duque de Morny, medio hermano de Napoleón III", y sobre todo que dispone de sólo 26 suites y 14 habitaciones a precios que oscilan entre 900 y 1800 euros por día.
El propio diario Clarín consignó que, ante semejantes repercusiones periodísticas, la familia se vio obligada a mudarse de hotel. Y según un "poderoso empresario francés, amigo de la pareja", los Macri adelantaron para este sábado su previsto viaje a la Costa Azul, donde pensaban pasar los 14 días de lo que se llama "cuarentena libre" europea. Esta información fue más tarde desmentida desde Buenos Aires por "el entorno" del expresidente, aunque la corresponsal del diario insistió con que la recepcionista del hotel negó tres veces que alguien de ese nombre estuviera alojado allí.
En realidad no se trata de una "cuarentena" como se entiende actualmente en Argentina, que obliga a los aislados a confinarse en un domicilio sin poder salir a la calle. Francia no impone esa restricción a los ciudadanos europeos. Justamente fue por su nacionalidad italiana, que comparte con la argentina, que Macri pudo viajar sin problemas a Paris, algo que los demás argentinos aún no pueden hacer .
Como Suiza, el próximo destino del ex presidente, exige que los ingresantes a su país hayan pasado por lo menos 14 días en otro país europeo, es que los Macri aparentemente decidieron hacerlo en la Costa Azul. El destino donde pasarán sus vacaciones, y sobre todo el lugar de alojamiento, se mantiene en secreto para evitar una reacción parecida a la que desató su elección en París.
La corresponsal de Clarín en Paris, María Laura Avignolo, no se privó de señalar que La Reserve es "el discreto refugio de príncipes, estrellas del espectáculo" y que el “timing del ex presidente argentino de elegir el hotel más exclusivo y privado de Paris dejó a la intemperie una torpeza política, que hasta incomodó y asombró a sus pares del PRO y de Cambiemos".
En general, la reacción dentro de la principal fuerza opositora fue en voz baja y solo asomó a la superficie a través de seguidores connotados, aunque sin cargos importantes en el presente, como la historiadora Sabrina Ajmechet, muy activa en las redes, o periodistas que se hicieron "eco", como Luis Novaresio en Animales Sueltos.
Apenas se enteró del viaje, Ajmechet señaló que "las tres acciones públicas de Macri desde que dejó la presidencia fueron la conversación con Alvarito Vargas Llosa, la visita al presidente paraguayo e irse a París con la flia a asumir la presidencia de la FIFA. Está haciendo un gran trabajo para que el líder de la oposición sea otro". Aunque exagera un poco con lo de la "presidencia de la FIFA", apenas será titular de la Fundación, se divierte explayándose sobre el asunto. "Al final, contra toda predicción, fue Macri el que logró cerrar la grieta. Tanto Kirchneristas como Cambiemitas estamos de acuerdo que está mal que se vaya con su familia a Paris a asumir la presidencia de la FIFA mientras los ciudadanos argentinos estamos todos encerrados", ironiza.
Luis Novaresio exploró el mismo andarivel en su programa del viernes. "Macri acaba de renunciar como jefe de la oposición", aseguró al momento de comentar la partida del ex presidente hacia Paris. Sus compañeros de mesa escarbaron sobre la herida: "Si contáramos las cosas que dijeron por celular los dirigentes de Juntos por el Cambio cuando se enteraron por los medios de la novedad, sería un verdadero escándalo".
Refugiado en algún lugar de Francia, Macri tomó distancia de los medios. Habrá que esperar a su llegada a Suiza para conocer el segundo capítulo de la saga.