Finalmente llegaron las vísperas del martes de definiciones en torno a la cuestión del regreso (o no) del fútbol en nuestro país: desde las 16, se reunirán el presidente de la AFA, Claudio "Chiqui" Tapia, con autoridades del Gobierno nacional para resolver si los equipos de fútbol puedan retomar los entrenamientos, o al menos los cinco clubes que deberán, en teoría, volver a competir en la Copa Libertadores el 17 de septiembre próximo.
Tapia tendrá enfrente al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, al ministro de Salud, Ginés González García, y al ministro de Deportes y Turismo, Matías Lammens. En la reunión, el Gobierno nacional deberá dar respuesta al protocolo que la AFA confeccionó y envió hace quince días, para luego intentar conseguir un punto de encuentro entre ambas partes respecto de la fecha, justamente donde hay posturas marcadas.
Por un lado, el Gobierno dejó en claro su idea de que el fútbol no puede retomarse en estas condiciones, en plena curva ascendente de contagios en la región metropolitana, donde se concentra la mayoría de los clubes y futbolistas de los equipos de las principales categorías.
El presidente de la Nación, Alberto Fernández, aseguró el viernes que "extraña" el fútbol "tanto como la mayoría de los hinchas", pero remarcó que ante el crecimiento de la circulación comunitaria del coronavirus no pueden autorizar su retorno, tal como pide la AFA. A última hora del domingo, González García confirmó el encuentro de este martes y anunció: "Vamos a tratar, con responsabilidad, de ver cómo se reinician las actividades, pero no les puedo decir el día".
Por su parte, el objetivo de máxima de Tapia es que el próximo lunes 10 de agosto vuelvan a entrenar todos los clubes de Liga Profesional (Primera) y Nacional (Segunda División). El horizonte más favorable que dejaron trascender los dirigentes del Comité Ejecutivo de AFA es que las prácticas retornen en esa fecha luego de realizar testeos masivos a todos los integrantes de cada plantel (40 personas cada uno), con 72 horas de antelación, tal como dicta el protocolo.
Mientras tanto, ante la posibilidad de concretarse la vuelta a los entrenamientos, los cinco representantes argentinos que participarán de la reanudación del fútbol con la Copa Libertadores, Boca, River, Racing, Defensa y Justicia y Tigre, ya están llevando adelante sus estrategias para materializar el regreso a las prácticas.
Todos apuntan a hacerlo fuera de la Ciudad de Buenos Aires. Boca y River quieren volver a los trabajos con la modalidad protocolar por la pandemia de coronavirus en sus respectivos predios de Ezeiza, aunque en el caso de este último analizan que los futbolistas no vayan y vuelvan diariamente a sus domicilios, sino que se concentren en un hotel en el partido de Esteban Echeverría, sobre la autopista Ricchieri. Los Xeneizes están buscando otro de la vecina localidad de Carlos Spegazzini.
Racing, por su parte, tenía un principio de acuerdo para entrenarse en el predio de Aldosivi de Mar del Plata, en Punta Mogotes. Sin embargo, en las últimas horas su presidente Víctor Blanco reveló que se inclinarían por utilizar alguna de las muchas canchas que tiene el club en el predio Tita Mattiussi.
Defensa y Justicia es el que menos problemas de logística presenta: tiene previsto armar una "burbuja" en su complejo de la localidad de Bosques, cercana a La Plata, donde los jugadores no tendrían que moverse de allí, ya que en ese lugar podrán entrenarse y concentrarse. En tanto, Tigre ya eligió un country de Pilar, para hacer algo parecido a Defensa y Justicia, aunque allí el tema a resolver pasa por el hospedaje.
La AFA anunció que se hará cargo del costo de todas las pruebas de los equipos, tanto masculino como femenino, así como de la movilidad de los y las futbolistas en transporte privado.
De todas maneras, Cafiero aclaró este lunes que el "protocolo que se recibió de AFA no está definido, y recién cuando se resuelva en la reunión, se verá, porque la situación epidemiológica en el AMBA es muy restrictiva". La palabra final parece tenerla solamente la evolución de la pandemia.