Un proyecto de ley que ingresó en la Legislatura porteña busca crear la figura oficial de promotoras y promotores territoriales de géneros y diversidad en los barrios populares. La legisladora Laura Velasco (Frente de Todos), autora de la iniciativa y presidenta de la Comisión de Mujer, aseguró que el proyecto busca "otorgar reconocimiento al trabajo que se realiza mediante la organización social y popular, de promotoras y promotores territoriales que conocen los barrios y ponen el cuerpo para dar soluciones a quienes atraviesan situaciones de violencia por motivos de género”. El proyecto, que lleva el nombre de Bety Quispe, promotora de género de la villa 1-11-14 fallecida durante la pandemia de covid-19, busca que los y las promotoras formen parte de los equipos de los Centros Integrales de la Mujer (CIM) de la ciudad.
Desde hace unos años las organizaciones sociales y políticas que trabajan en los barrios populares de la ciudad trabajan en torno a la cuestión de género, y la figura del promotor o promotora -- mayormente son mujeres -- de género se conviritó en pieza clave en el trabajo territorial en los barrios. Además de brindar recursos, información o capacitaciones en género y diversidad, los y las promotoras realizan relevamientos en los barrios para conocer los casos específicos de violencia de género y dar a las víctimas las ayudas necesarias.
En este sentido, el proyecto de Velasco busca definir oficialmente la figura de "Promotor/a Territorial de Géneros y Diversidad" como "la persona de la comunidad que se forme para promover los derechos de las mujeres y personas LGBTI+". Para eso, prevé que la figura se incorpore a la estructura estatal de la ciudad "de forma permanente" y a través de "las Consejerías de Género de los centros comunitarios barriales que funcionan en cada uno de los CIM".
Entre las principales funciones del o la promotora del CIM que establece el proyecto se encuentran las de relevar y analizar datos del barrio en materia de violencia de género, facilitar el acceso a los programas relacionados con violencia doméstica, derechos sexuales, reproductivos y no reproductivos, y planificar acciones como charlas y talleres para la promoción de derechos. Además, según el texto, el Gobierno porteño deberá garantizar de modo gratuito el acceso a la capacitación continua de las y los promotores.
Velasco explicó que, aunque atraviesa a "cualquier clase social", la problemática de la violencia de género se profundiza en los barrios populares, ya que "ante la falta de recursos que les permitan salir de las situaciones de violencia, las personas que provienen de los sectores más vulnerables son las más castigadas".
Los fundamentos de la ley detallan que, según datos de la Oficina de Violencia Doméstica, del total de víctimas de violencia de género registradas en el primer semestre de 2020 en la Ciudad, el 44 por ciento proviene solo de cuatro de las quince comunas: La Comuna 8 – incluye Villa Soldati, Villa Riachuelo y Villa Lugano-, Comuna 4 -La Boca, Barracas, Parque Patricios y Pompeya-, Comuna 1 -Retiro, San Nicolás, Puerto Madero, San Telmo, Montserrat y Constitución- y Comuna 7 -Flores y Parque Chacabuco-.
En este contexto, el trabajo de los y las promotoras territoriales se vuelve fundamental, explica la iniciativa. "Son quienes conocen como nadie las realidades de cada uno de los barrios y día a día ponen el cuerpo para brindar soluciones", sostuvo la legisladora. Por este motivo el proyecto establece que, para la selección del personal, se deberá tener en cuenta "que viva en la comuna del CIM en el que va a trabajar" y se valorarán "sus saberes previos y capacitaciones anteriores". De esta manera se buscará que sean los y las promotoras que ya trabajan en los barrios y conocen sus realidades quienes pasen a formar parte de la planta de los CIM.
Por eso la iniciativa lleva el nombre de Bety Quispe, promotora de género del barrio 1-11-14. Quispe era “una enorme militante popular que falleció durante la pandemia, promotora de género que se formó, comprometió y trabajó todos los días en los barrios por el acceso a los derechos de niñas, adolescentes, mujeres y personas LGTBI+”, detalló Velasco.
El proyecto ingresó oficialmente a la Legislatura la semana pasada y próximamente será tratado en las comisiones de Mujer, de Derechos Humanos y de Presupuesto y Hacienda. Voceros del FdT adelantaron que, de llegar al recinto, la aprobación de la ley dependerá del bloque de Vamos Juntos que, junto a UCR - Evolución, tiene mayoría legislativa.
Informe: Santiago Brunetto