El nombre de Ellen Fokkema, una neerlandesa de 19 años, podrá quedar en la historia del fútbol, si el revolucionario proyecto que va a protagonizar tiene éxito: a partir de la próxima temporada, Fokkema será la primera futbolista que podrá jugar en un equipo formado por hombres en el torneo de la cuarta división de los Países Bajos, en un plan pionero que puso en marcha la Federación de Fútbol de ese país. La mediocampista se desempeña para el club VV Foarut, donde podrá jugar en un equipo con compañeros varones.
"Se trata de una iniciativa cuyo objetivo es conseguir una mayor participación de mujeres en equipos profesionales masculinos", explicaron desde la KNVB (Real Asociación Neerlandesa de Futbol). Hasta el momento, en los Países Bajos sólo se permitiía a las mujeres jugar en equipos mixtos hasta los 18 años, a partir de entonces cada uno debía ir a divisiones de su mismo sexo.
"Juego con chicos desde que tenía cinco años y no me tomé bien el no poder seguir jugando con ellos la próxima temporada. Consulté al club si era posible seguir y presentamos una solicitud a la Federación, que me autorizó a continuar en este plan piloto", declaró Fokkema.
"Me siento muy feliz y sobre todo porque mis compañeros de equipo me apoyaron y reaccionaron con mucho entusiasmo al enterarse que me quedaré con ellos en el equipo", añadió la futbolista en declaraciones difundidas a través de un comunicado.
Por su parte, la KNVB expresó que tomará el caso de Fokkema como un experimento con la posibilidad de extenderlo, ya que todos los años reciben solicitudes de mujeres para poder integrarse a clubes de varones. En el caso de que el plan resultara exitoso, la organización tiene previsto otorgarse más permisos de forma regular.
"Se trata de un plan piloto y revolucionario que dará comienzo la próxima temporada con la idea de evaluar si existe la posibilidad de permitir que hombres y mujeres integren equipos mixtos en categorías superiores", destacó la Federación.
Como en algún momento el nombre del belga Jean Marc Bosman revolucionó el fútbol en 1995, cuando cambió las reglas del mercado de Europa, posibilitando que los los futbolistas gozaran los mismos derechos que cualquier otro trabajador en el continente, ahora Fokkema podría llevar adelante un hito similar. Habrá que ver como evoluciona el caso, pero el primer paso ya está dado. Y, tal vez en el futuro, no sea extraño ver un equipo mixto en una primera división.