Marcelo Gallardo no podrá contar con todos sus jugadores de cara a la vuelta a los entrenamientos programada para este lunes. A las anticipadas bajas del colombiano Juan Quintero y el paraguayo Roberto Rojas, quienes todavía están cumpliendo con la cuarentena obligatoria tras regresar al país en los últimos días, se le sumó la ausencia de Matías Suárez.
El delantero deberá permanecer en cuarentena al menos hasta el martes en su domicilio en el barrio privado Cañuelas Golf de la ciudad de Córdoba, luego de que este miércoles el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) dispuso un cordón sanitario en el lugar tras conocerse un brote de 21 casos positivos de coronavirus.
Suárez debía regresar a Buenos Aires para sumarse el lunes a las prácticas, pero tras conocerse los contagios, el jugador tiene que permanecer en cuarentena una semana más. "Matías vive en este lugar y se encuentra en su domicilio. A las cero horas de hoy (miércoles) el COE Central de Córdoba dispuso un control sanitario de aislamiento, que va a durar siete días, en primera instancia", señaló el comisario local, Gonzalo Cumplido en diálogo con TyC Sports.
"Son 300 familias las que habitan el barrio y hay una restricción para entrar y salir, aunque eso puede cambiar de acuerdo a los trabajos de campo de los sanitaristas y epidemiólogos. En esos 21 casos no está Matías. Hay veces que los tiempos se han extendido o acortado, todo depende de los resultados que vayan obteniendo. A veces, pueden flexibilizar la situación de algunas de las personalidades que figuran como esenciales, que también puede ser la del jugador de fútbol, porque acá también viven médicos", añadió el uniformado.
De esta manera, Suárez se suma a lista de jugadores que no estarían presentes en los entrenamientos desde el inicio y deberán completar su aislamiento, como Quintero y Rojas. En caso de no haber inconvenientes, el colombiano quedará habilitado para sumarse a las prácticas el jueves 13 de agosto mientras que el paraguayo podría regresar el viernes 14.
En cuanto al resto de los extranjeros, el chileno Paulo Díaz, el uruguayo Nicolás De la Cruz y los colombianos Jorge Carrascal y Rafael Borré, llegaron con el tiempo exacto para que el fin de semana que viene antes de entrenar hayan cumplido los 14 días de aislamiento social obligatorio que se impone para los que regresan desde el exterior.
El plan de River es realizar este viernes los testeos en dos clínicas privadas al plantel, al que se le sumarán un buen número de juveniles ya elegidos por Gallardo en caso de que aparezcan nuevas bajas. Días después, en el predio de River en Ezeiza se efectuará un segundo análisis para quedar habilitados a entrenar en grupos tal como lo marca el protocolo de salud.
River tiene programado tres partidos de la Copa Libertadores consecutivos en la segunda quincena de septiembre, ante San Pablo y Binacional, en ambos casos de visitante, y frente a la Liga de Quito, de local. El equipo de Gallardo cerrará su participación en el Grupo D el 20 de octubre como local ante San Pablo.
En cuanto a la localía, River deberá resolver donde jugará sus partidos ya que por una obra en el césped del campo de juego del Monumental no se utilizará hasta el año que viene y la Conmebol no lo autoriza a jugar en su centro deportivo de Ezeiza por temas relacionados con la iluminación y las transmisiones televisivas.
Para el torneo local, como se jugará sin público, ya están preparando el River Camp porque podría jugar los partidos en ese lugar y de día con luz natural, algo que la Comisión Directiva deslizó en los últimos días.