La diputada del Frente para la Victoria (FpV) Juliana Di Tullio puntualizó que cualquier acuerdo o convenio de compra de armas entre la Argentina y otro país “debe pasar por el Congreso” y, en este sentido, cuestionó la solicitud que el gobierno nacional le hizo a Estados Unidos para la compra de armamento por 2 mil millones de dólares. Además, anticipó que “se está hablando con otros bloques” para sumar voluntades e interpelar por este escándalo a la canciller Susana Malcorra, y al Ministro de Defensa, Julio Martínez.
“Nuestro país no tiene ninguna hipótesis de conflicto como para hacer una compra de semejante armamento”, fundamentó la legisladora, quien también cuestionó la vía a través de la cual la gestión de Cambiemos hizo la solicitud: el lobby hecho por el embajador en Washington, Martín Lousteau, a través de una carta al senador demócrata Peter Visclosky, titular de la subcomisión del Congreso estadounidense encargada de analizar y autorizar la venta de armamento a otros países.
Tal como lo informó Página/12, la antesala de este pedido había sido una reunión entre el congresista estadounidense con los diputados oficialistas Eduardo Amadeo y Luciano Laspina. Para Di Tullio, “no es normal que un diputado oficie de lobbista”, no solo porque “está afuera de cualquier tarea” propia de un legislador sino porque, además, “el lobby no está regulado en la Argentina”.
Di Tullio también puso en tela de juicio el pedido hecho por Lousteau para que Washington incluya a la Argentina en el presupuesto estadounidense de operaciones extranjeras, lo cual haría que el país fuera destinatario de equipos armamentísticos sin costos. Pero aún así, “si fuera una donación, debería ser investigada por el Congreso”, puntualizó la diputada.
“Deberían haber firmado un documento bilateral” que establezca la transacción, explicó la diputada al tiempo que insistió que, aunque esto hubiera ocurrido, “ese convenio no tendría ninguna validez si no pasa por el Congreso”.
En su opinión, la idea de que Argentina adquiera armamentos norteamericanos no es un decisión del gobierno de Cambiemos, sino que “es una decisión unilateral de Estados Unidos, que nos tiene embargados para comprar armas” desde el escándalo por la venta de armamentos a Ecuador, durante el gobierno de Carlos Menem.
Por otra parte, Di Tullo aseguró el Estado argentino no tiene disponibles 2 mil millones de dólares. “Y si los tuviera, no tendría por qué hacer esta compra” porque “no hay razones válidas” para hacerlas.
En este sentido especificó que el artículo 11 del presupuesto faculta al jefe de Gabinete de Ministros a disponer de fondos y asignar hasta 180 millones de pesos para la compra de material bélico, una cifra que “no alcanza” y dista mucho de los 2 mil millones de dólares ofrecidos por Argentina para esas transacciones.
“No hay una hipótesis de conflicto en la región y Argentina es un país de paz”, recordó y advirtió que “hacerla, implicaría un cambio muy drástico en la política de defensa”. Por esto, agregó, el Ministerio de Defensa tendría que “explicar cuál es el objetivo de esa compra”.