Después del frustrado intento del jueves pasado, el Concejo Municipal tuvo su sesión extraordinaria en la escuela Marcos Sastre de la isla El Espinillo, frente a la costa central de la ciudad. Durante la soleada jornada que se inició al mediodía y se extendió hasta 14.30, los ediles rosarinos votaron cerca de 20 proyectos vinculados a los incendios indiscriminados en el Delta del Paraná. 

La sesión, que se inició a las 12 en punto luego del izamiento de la bandera, se llevó a cabo al aire libre en el patio de la escuela, espacio que se acondicionó para poder mantener el distanciamiento social correspondiente entre concejales, periodistas y trabajadores del Palacio Vasallo. 

Luego de leer un documento que le entregaron las autoridades escolares con propuestas y necesidades de esa comunidad educativa isleña, la presidenta del cuerpo legislativo, María Eugenia Schmuck, le concedió la palabra a cada uno de los representantes de organizaciones ambientalistas que estuvieron presentes y que integran la Multisectorial por la Ley de Humedales: Mundo aparte, Paraná no se toca, Sentido ambiental, Amsafé Rosario y autoconvocados. 

Posteriormente, comenzaron las exposiciones de cada uno de los 18 concejales presentes, mientras que los 10 restantes no pudieron acudir por pertenecer a grupos de riesgo o por distintas realidades previamente justificadas. Los discursos estuvieron enfocados principalmente en la necesidad de que el Congreso de la Nación apruebe una Ley de Humedales, en castigar penalmente a los responsables de las quemas y en poner el foco no solo en las islas entrerrianas sino también en el sector del humedal que pertenece a Rosario y en donde se tiene jurisdicción. 

Finalmente, se procedió a votar por unanimidad cada uno de los proyectos que se venían debatiendo en el Concejo y que están relacionados con la problemática. En ese sentido, entre las iniciativas aprobadas durante esta tarde se encuentran una convocatoria a una reunión interjurisdiccional con el Concejo Municipal de Victoria para discutir el tema, la creación de la Comisión Asesora Permanente de Seguimiento y Evaluación para la Conservación de los Humedales,  la realización de controles permanentes de la calidad del aire en la ciudad y la instalación de estaciones de monitoreo, además de varios pedidos de informes y solicitudes a autoridades nacionales y provinciales para que tomen, de una vez por todas, cartas en el asunto.