“El Estado y la sociedad trabajando en conjunto vamos a poder superar esta situación”, resaltó Mabel Careaga, referente del movimiento de derechos humanos y una de las impulsoras de la Iniciativa por el Resguardo de los Derechos Humanos frente a la covid-19 en la Ciudad de Buenos Aires. La propuesta de Careaga se vuelve pancarta de vanguardia frente a una situación en la que, según el dispositivo creado para evaluar el respeto a los derechos durante la pandemia, “se está jugando con fuego”, en palabras del biólogo y profesor universitario Franco Marisco, otro impulsor de la iniciativa. La conclusión que reunió más consenso tras un encuentro del espacio se basó en la necesidad de que “haya una cuarentena estricta” durante las próximas semanas y que tanto el Estado nacional como el porteño “desplieguen políticas” para que ese aislamiento pueda llevarse a cabo.
La Iniciativa por el Resguardo de los Derechos Humanos (IRDH) ante la covid-19 compartió su preocupación frente a la situación que atraviesa el Área Metropolitana de Buenos Aires, informe y proyección de datos incluida, en una conferencia de prensa en la que participaron referentes de organismos de derechos humanos, de agrupaciones sindicales y de la investigación científica y que se realizó mediante teleconferencia.
“Queremos manifestar la preocupación que genera el aumento de casos (de contagios de coronavirus), la tensión que esto genera en el sistema de salud y la necesidad que va a surgir para que las personas se queden efectivamente en sus casas, la necesidad de que haya de parte del Estado un llamado fuerte a la sociedad para que cumpla con el aislamiento pero también para que asista a quienes requieren de ayuda”, resumió Careaga, referente de la agrupación Familiares y amigos de los 12 de la Santa Cruz. “Es la única manera de defender y resguardar los derechos a la vida y la salud”, remarcó.
Durante la charla, expertos compartieron cifras surgidas del trabajo “Proyección de tendencias y evaluación de escenarios de intervención para la epidemia covid-19 en Argentina mediante Modelado y Simulación Computacional”, realizado por el ICC de UBA-Conicet, para reflejar la situación de saturación del sistema de salud a la que el AMBA y Rosario se enfrentarían durante el próximo mes.
Según los cuadros presentados durante la conferencia por el investigador Rodrigo Castro, de continuar la tendencia actual se alcanzarían los 10 mil casos diarios en la segunda semana de septiembre, lo cual implica alcanzar --en menos de un mes-- un ingreso diario de 200 a 300 nuevos pacientes a Unidades de Terapia Intensiva. “La situación es muy compleja, no hay nada en los análisis de los datos que justifique más apertura y menos distanciamiento social”, alertó Castro.
Su colega Ernesto Kaufman se explayó sobre la situación que atraviesa Rosario, en donde se logró “inicialmente eliminar el virus, gracias a un gran trabajo del sistema de salud Municipal y Provincial”, pero en julio, al relajarse “demasiado” las medidas de distanciamiento “se hizo evidente el crecimiento de casos”.
“No puede ser que (el jefe de gobierno porteño, Horacio) Rodríguez Larreta siga levantando todas las restriccciones. Acá se está violando el derecho humano a la vida”, advirtió la Madre de Plaza de Mayo Taty Almeida durante su breve intervención. También participaron la integrante de Madres Vera Jarach y el titular del Servicio Paz y Justicia, Adofo Pérez Esquivel. Ambos compartieron la preocupación del colectivo. “La defensa de los derechos humanos es integral”, sostuvo Pérez Esquivel, quien recordó la reflexión del presidente Alberto Fernández sobre que “la economía se recupera, una vida no”, y pidió “extremo cuidado para los más vulnerables, que son los que más sufren las consecuencias de la pandemia”.
El periodista de PáginaI12 Alfredo Zaiat señaló que los derechos a la vida y a la salud “deben estar garantizados por el Estado, a través de política sanitaria y económica de emergencia”, aunque invitó a analizar la situación como “una puja política” en la que existe “una militancia anticuarentena arraigada no solo en un discurso vinculado a la libertad sino a intereses políticos y económicos”, como los de Techint, Clarín, La Nación e Infobae. “Son sectores que han estado debilitando día a día ese esfuerzo social vinculado con la protección. Por eso es importante que los movimientos sociales y políticos empiecen a tomar cuenta de esta disputa y actúen”, apuntó.
Por último, Zaiat también subrayó que en la Ciudad de Buenos Aires, “el distrito más rico del país”, hay un discurso de doble vara: “Se dice que está todo mejor, cuando los indicadores son cada vez peores. No tiene políticas específicas económicas de emergencia. No tiene ATP para comercio e industria, no tiene un IFE ni asistencia especial para sectores más vulnerables de villas miserias ni barrios populares. Esto está encubierto por los medios de comunicación. No lo dicen”, advirtió.
La crisis que atraviesan los trabajadores en CABA fue respaldada por los testimonios de dirigentes sindicales como Angélica Graciano, de UTE, y Daniel Catalano, de ATE, quienes denunciaron que el gobierno porteño retacea recursos y desprotege a los sectores docentes y sanitarios. El dirigente del Suteba Roberto Baradel insistió en que “el problema de CABA no se acaba allí. En la medida de que las políticas no sean articuladas con otros territorios no se frenarán los contagios”. En ese sentido, el gremialista docente insistió en que es “fundamental para dotar al Estado de mayores recursos y hacer frente a esta pandemia y sostener el aislamiento, avanzar con el impuesto a las grandes fortunas. Vamos a salir de esta crisis con más Estado, no dejando librado a su suerte al pueblo argentino”.