Cuatro travesías épicas entre 1931 y 1955 encumbraron a Vito Dumas como el mayor navegante solitario de la historia y un auténtico ídolo popular. Pero la envidia y el odio de algunos lo convirtieron en el "hecho maldito" de la náutica argentina. Así lo refleja el documental El navegante solitario, escrito y dirigido por el profesor, divulgador científico y realizador Rodolfo Petriz, que aborda la la vida y las hazañas deportivas de un personaje que para el cineasta "es una figura renacentista, una persona con elementos del héroe byroniano".

Petriz apela al testimonio del periodista Ezequiel Fernández Moores para hacer su primer largometraje y en una entrevista a Télam explicó que Dumas "fue parte de un grupo de deportistas y artistas que por estar ligados al peronismo sufrieron un gran menosprecio y quedó atravesado por esa historia argentina".

Ezequiel Boetti escribió en Página/12 que "al igual que gran parte de los documentales sobre personajes históricos no del todo conocidos, El navegante solitario encuentra sus principales focos de interés en el valor testimonial de lo narrado y el hallazgo de materiales de archivo familiares y periodísticos".

Además, destaca  que "puede pensarse como una película de aventuras decimonónicas que enfrenta a su héroe tanto a los cambios políticos de la Argentina como a los embravecidos caprichos de la naturaleza: habrá, entre otras delicias, olas kilométricas, vientos atronadores, un paso por ese cementerio naval que es el Cabo de Hornos, roturas inesperadas, una amputación inminente, enfermedades y hasta un récord (totalmente involuntario) de navegación ida y vuelta en el Atlántico ante la imposibilidad de dominar la deriva de su bote, tal como recuerda su biógrafo Ricardo Cufré. 

El navegante solitario, de Rodolfo Petriz, se emite hoy a las 18 por el Canal CineAr