Un gran colectivo de artistas, docentes, gestores culturales, y funcionarios se dieron cita virtual esta semana para debatir sobre el futuro del arte y la cultura en el extenso territorio bonaerense. “La provincia de Buenos Aires, con 300 mil kilómetros cuadrados y una gran diversidad cultural, ofrece la posibilidad de reinventar su identidad, rescatarla y ponerla en el centro de la escena” sostuvo el gobernador Axel Kicillof, al presentar el primer encuentro de Culturas bonaerenses.

En el Salón Dorado de la gobernación, en esa presentación junto a Kicillof, se encontraba al ministro de Cultura de la Nación, Tristan Bauer, y su par bonaerense el ministro Augusto Costa. En representación de los artistas estaban, la actriz Cristina Banegas y la cantante platense Carmen Sánchez Viamonte. “El proyecto que tenemos para la provincia tiene a la cultura como uno de los ejes y por eso es importante este encuentro”, destacó Kicillof. Y señaló: “hacerlo en el medio de la pandemia, con todas las dificultades que hay, le da más relevancia”.

El panorama del sector cultural no escapa a la tragedia general. “La pandemia le paga un mazazo al sector del arte y la cultura, que ya con el macrismo había caído a pique, estaba desfinanciado y sin proyecto, o con un proyecto al servicio del mainstream”, explica Costa. El ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de provincia de Buenos Aires, habla desde una cartera que en esta gestión se permitió una osadía: incluir Cultura como área productiva. Y con este evento, abre la posibilidad de “debatir estrategias para poder salir de ésta fortalecidos, porque se viene brava…”, reflexiona ante la consulta de Página/12, sobre el encuentro virtual, que se pudo seguir por el canal de YouTube del Ministerio de Producción.

A la incertidumbre, Costa responde con acciones. Ese es el marco del encuentro destinado a debatir sobre producción, identidades y derechos en tiempo de pandemia. “Y sobre las transformaciones necesarias para reactivar el enorme potencial cultural de la provincia” apunta el ministro bonaerense sobre la propuesta que reunió, en las dos jornadas de seminarios, diversas miradas y diagnósticos en torno al sector. Y fueron seguidos por unos dos mil asistentes en línea.

El objetivo era “analizar la situación y pensar como sigue la actividad cultural en la pos-pandemia, cuáles van a ser las transformaciones necesarias y cómo nos tenemos que reinventar en el sector”, detallo Costa en la apertura. “Lo central es no quedarnos como espectadores, sino reflexionar para ser actores efectivos de esta situación”, enfatizó Bauer.

El primer diagnóstico desde el colectivo de artistas estuvo a cargo de Cristina Banegas: “La cultura de la resistencia y la capacidad de reinventarnos son parte de nuestro ADN –sostuvo la actriz-. Somos luchadores de fondo, ahí está nuestra fuerza”, dijo luego sobre el mapa de “una cultura devastada, en esta tragedia planetaria”.

La propuesta se diseminó luego, durante dos días –miércoles y jueves- en una serie de debates donde no faltaron las voces críticas ni las miradas solidarias: “La imaginación y la solidaridad, son los motores que nos pueden orientar en las crisis. A situaciones excepcionales le corresponden ideas excepcionales” puntualizó Pedro Saborido, productor, guionista, dramaturgo y humorista en el debate compartido con Liliana Herrero.

En otra mesa, la actriz y funcionaria, Victoria Onetto –es secretaria de Cultura del municipio de Avellaneda- reflexionó sobre “Escena, literatura y políticas culturales” junto a la escritora María Pía López. “Sostener a los artistas locales en esta situación dramática” fue uno de los ejes en cuanto a políticas públicas. Y la posibilidad de contar con el fondo que Provincia habilita para el sector, estipulado en trescientos millones de pesos “para la gestión de la cultura en el territorio”, indica Onetto.

En esa mesa de debate, se abordó también y en relación al tópico de “Escena”, la característica de la presencialidad tan propia del teatro. Un interrogante en el escenario de pandemia con distancia social. “Tenemos que ver cómo hacemos los teatreros, porque la corporalidad es esencial en el teatro”, destacó al respecto Cristina Banegas en su presentación. “No alcanza con lo virtual, no alcanza con el streaming porque además los teatros independientes no podemos pagar el costo de esa tecnología” sostuvo Banegas. “Yo no voy a aceptar un mundo virtual”, coincidió Liliana Herrero desde otro panel. “No hay un mundo virtual, porque cuando hay mundo hay abrazos, hay peleas, hay marchas –insistió- y lo demás, no es mundo”, enfatizó.

La mirada generacional

Al iniciar el evento, la advertencia estaba hecha. “Este es un encuentro muy valioso porque sabemos que hay muchos proyectos truncados, y la pandemia fue una pedrada que recibimos como Gobierno, como espacio político y como generación” expuso Kicillof. “Yo denominé ‘tierra arrasada’ a la situación desoladora que nos dejó el neoliberalismo, pero el campo popular se las arregló para revertir eso”, aseguró.

“Hoy estamos arreglando esos problemas y en la peor de las circunstancias, en el medio de una pandemia que destrozó a la economía mundial. Hay que reinventar las culturas para preservar nuestro patrimonio común y las identidades particulares, frente a las concepciones hegemónicas de la globalización”, sostuvo el gobernador.

El ministro de Producción coincidió en que “la cultura es un eje central del aparato productivo. Queremos enmarcar la política cultural para potenciarla con el resto de las áreas y así poder lograr un impacto directo en el desarrollo integral de la provincia. Queremos recuperar el patrimonio perdido por la desidia y garantizar los derechos culturales. La pandemia no cambió nuestros objetivos” aseguró Costa.

Para Bauer, la relevancia de hablar de “culturas bonaerenses” pone en primer plano “el concepto de diversidad, fundamental para nosotros”, dijo. Para destacar luego la necesidad de trabajar en forma colaborativa entre Nación y Provincia. “Estamos aprendiendo de los diálogos con centros culturales, talleres de teatro, con artesanos, donde aparece el lema de mantener la llama de la cultura encendida, tan importante en estos momentos”, describió.

Los debates

El calor de la discusión se encendió en los debates. “La situación se repite en todas las prácticas artísticas y culturales –expuso en su panel, Liliana Herrero- ya que hemos sido considerados siempre, un adorno. Eso no parece contribuir a un pensamiento sobre la patria y la política”. La artista habla del arte como pensamiento transformador de un territorio y un tiempo. Habla de un “abandono de la comprensión de los que somos”. Y a eso se le suma “la situación caótica de la pandemia” detalla.

Herrero convoca a construir comunidades. Pone a la música como ejemplo: “La música es una construcción colectiva, es una conversación sobre memoria y territorio, pero eso no está apareciendo en lo que llamamos la industria cultural, el mercado, o la pantalla de la Televisión Pública, y escasamente reflexionamos sobre eso”, advierte, siempre a gusto en su tránsito al costado de los caminos costumbristas. “Me ha gustado siempre el riesgo de pensar por fuera de los caminos acostumbrados”, señala Herrero. Y provoca al preguntarse sobre las ideas innovadoras: “Todavía no las veo”, sostiene.

Saborido coincide en la construcción colectiva, y advierte sobre la dificultad de pensar “en la cultura meritocraticamente, y de salvarse en soledad”. Las redes, aparecen como la posibilidad de generar esa comunidad tan necesaria, desde donde poder vincular patrimonio cultural con el acceso a la cultura “y con el derecho a la cultura”, apunta Costa. En su gestión la cultura es parte de la trama productiva: “Pensamos a las cadenas de valor de los sectores de cultura, en este contexto difícil, pero desde lo que pueden ser las estrategias de salida de la crisis, sobre las transformaciones que necesitamos y sobre el rol del Estado es este contexto”.

“La cultura y el arte, con el PRO, se han venido a pique en la provincia, la gestión macrista dejó a todas las expresiones artísticas y culturales del territorio a la buena de Dios, a los artistas maltratados, a los trabajadores de la cultura en la lona. Algo que nos propusimos revertir con un proyecto centrado en la diversidad y en las identidades culturales de la provincia, para recuperar el rol de la cultura y el arte dentro del proyecto político que lleva adelante el gobernador”.

La cultura en la provincia

“La pandemia dio el golpe, pero estamos dialogando con los actores: con Nación, con los municipios y con los sectores de la cultura para salir fortalecidos de esta, que viene brava” dice el ministro Costa. El evento cumplió sus objetivos, abrir el debate. “Al armarlo estábamos en un momento medio álgido de la pandemia y las herramientas que tiene el Estado en Nación y Provincia ayudan a contener, pero son insuficientes, porque hoy es imposible reparar la pérdida de ingresos, pero dijimos igual lo hacemos, porque estoy va a pasar y tenemos que ver como lo transitamos” explicó.

Para Victoria Onetto, el evento fue importante “porque muchos referentes pudimos discutir los temas. Estuvimos los artistas, los escritores, los filósofos, los músicos, se han escuchado muchas voces” describe, sobre el debate que buscó tener una mirada crítica. “Solo así se puede pensar en estrategias a corto mediano y largo plazo y no solo por la pandemia –define la actriz y funcionaria-. Y a nivel de gestión cultural valoro lo que propone el ministro Costa de lograr políticas transversales para los 135 municipios y marcar ciertos ejes de gestión”.

“Que el sector marca una agenda, como cualquier sector productivo y el Estado tiene capacidad de impulsar a los sectores con políticas públicas que permitan sostenerse y visibilizar las producciones culturales” agrega Costa. Se refiere por ejemplo al uso de los medios públicos, que en la provincia esta desarrollando un proyecto llamado Código Provincia, “un registro de diferentes sectores de la cultura bonaerense –explica- para que se priorice por ejemplo en Radio Provincia, el catalogo que surja de ese registro con artistas regionales. Estamos bastantes rezagados en términos de lo que se podría hacer, pero es una línea”, concede.

En esa línea, Onetto destaca el Catalogo Cultural y Turístico, presentado recientemente que tiene la intención de sistematizar la comunicación entre los 135 municipios. “Y también para compartir el fondo de 300 millones que Provincia va a poner a disposición de los municipios según la cantidad de establecimientos culturales registrados”

La iniciativa de juntarse y escuchar, está cumplida, sostienen desde diversos ámbitos del sector. “Es importante que surjan los cuestionamientos, es sano” concluye Costa. Hay mucho para pensar y para internalizar como conceptos y visiones a futuro, cuenta. “En la vorágine de la gestión es importante detenerse y tener la posibilidad de escuchar a personas que están en los temas, a diario, en lo cotidiano, ese es un insumo fundamental para la política pública”.  

Cultura es producción

“Cultura es producción en un sentido amplio” dice el ministro Agusto Costa (foto), cuando se le pregunta por qué el área de Cultura en la provincia de Buenos Aires, depende de la cartera productiva que conduce. “Cuando pensamos esto con Axel, nos pareció oportuno diseñar un esquema integral, por eso hoy cultura interactúa con todas las áreas. Asumimos y evaluamos que el proyecto cultura tenía tres patas: recuperar el patrimonio cultural que estaba totalmente deteriorado, garantizar el acceso y el ejercicio de los derechos a la cultura sobre todo de los sectores más vulnerables, y una mirada sobre las industrias creativas como cadenas de valor, para integrarlas y fortalecerlas, siguiendo esta línea: cadena, patrimonio y acceso. Entendemos que eso desde la provincia era interactuando con el Ministerio de Nación y haciendo dialogar a Cultura con el resto de las áreas productivas de la provincia, fundamentalmente con turismo, de hecho, en el Ministerio también esta Turismo. Porque están relacionado con el contexto económico donde funcionan estas actividades”, define el ministro.

En la provincia, “había un ministerio totalmente vaciado, sin política, se habían gastado el presupuesto solo en programas de recitales gratuitos” cuenta sobre su llegada a la gestión. Y por eso estamos contentos con lo que estamos haciendo en este contexto, porque son muchas más cosas que si fueran áreas fragmentadas”, sostiene.

“Nosotros celebramos la recuperación del Ministerio de Cultura a nivel nacional porque eso define una perspectiva federal, un proyecto de cultura de país, es una reivindicación hayamos podido hacerlo”, explica Augusto Costa sobre la estructura de la gestión de gobierno.