Entre 2.500 y 3.000 personas se congregaron este domingo en la plaza Colón de Madrid contra del uso obligatorio de tapabocas y de otras medidas implementadas por el gobierno para hacer frente al coronavirus. Los manifestantes consideraron a las mascarillas "una auténtica tortura" y culparon a las autoridades de crear "una falsa pandemia". Como era de esperar, ninguno de los presentes usó tapabocas ni mucho menos respetó el distanciamiento social. El gran promotor de la nutrida movilización fue el cantante Miguel Bosé, que en los últimos días también se manifestó contra las vacunas y el 5G.
La jornada de protesta comenzó bajo la enorme bandera española de la plaza Colón, en el centro de Madrid. Los manifestantes levantaban pancartas en las que se leía, por ejemplo, "El virus no existe", "Las mascarillas matan" o "No tenemos miedo". Pilar Martín, de 58 años, viajó desde Zaragoza hasta Madrid porque cree que los gobiernos del mundo están exagerando las cifras de infectados para restringir las libertades. "Nos están obligando a llevar una mascarilla, nos quieren dejar en casa prácticamente encerrados. Nos están engañando continuamente hablando de rebrotes. Todo eso es mentira, la pandemia como tal ya no existe", afirmó. Los numerosos manifestantes no llevaban barbijo, pese a que su uso en la vía pública sigue siendo obligatorio en España.
En días previos a esta particular concentración se generó una polémica en Twitter después de que el cantante Miguel Bosé colgara varios videos entre los que resaltaba su apoyo a la convocatoria del domingo. Bosé, que en uno de los videos aseguró "Yo soy la resistencia", finalmente no asistió a la movilización. "Muchos ciudadanos queremos mostrar nuestro desacuerdo con las medidas implantadas en España por la covid-19 y por eso nos vamos a manifestar este domingo en Madrid", expresó el cantante en uno de sus tuits.
El diputado de Más País, Íñigo Errejón, no tardó en repudiar la movilización: "Por cada irresponsable de Colón hay millares de españoles que cumplen y que hacen frente al virus. Lo de hoy es un insulto a todas las personas que han sufrido sus efectos y a las que nos han cuidado en condiciones límite".