La secretaria general de la Asociación de Médicos de la República Argentina (AMRA) en Santa Fe, Sandra Maiorana, defendió a su colega Marcelo Palou, el médico que fue echado por los habitantes de la localidad santafesina de Cañada del Ucle por haber contraído coronavirus y denunció que el profesional sufre "un linchamiento social".
El médico Marcelo Palou trabajaba en el Centro de Salud de Cañada del Ucle, ubicado a 122 kilómetros de Rosario, donde se contagió de coronavirus y fue echado de su trabajo luego de que unos 300 vecinos -entre ellos el intendente- firmaran un petitorio.
"Yo no robé ni maté a nadie. El único error que cometí fue haberme contagiado de coronavirus cuando atendí a un paciente, que no tiene nada que ver, igual que su familia, que son unos seres maravillosos. Me contagié, igual que mi enfermera, pero lo peor que me hicieron fue aislar a mi hijo, que tiene 13 años y vive solo en un departamento", declaró el médico Palou al Canal 3 de Rosario.
Palou fue hostigado públicamente y en las redes sociales hasta que decidió dejar el cargo con este posteo: "Yo me voy del pueblo y que acá se arreglen como se puedan arreglar".
"Es una especie de inquisición lo que está pasando. Como lo que le sucede al colega de Cañada del Ucle, que toda su vida trabajó ahí, nunca tuvo vacaciones y no se podía ir los fines de semana porque el pueblo se quedaba sin médico", insistió Maiorana.