El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, envió una carta a los 194 países miembros para solicitarles que se adhieran al futuro dispositivo COVAX, pensado para asegurar el acceso equitativo de la vacuna contra el coronavirus. Se trata de un nuevo instrumento de financiación destinado a incentivar a los laboratorios a que produzcan una cantidad suficiente de vacunas para que se garantice su distribución en los países en vías de desarrollo.
"Debemos prevenir el nacionalismo de las vacunas", señaló Ghebreyesus en una conferencia de prensa virtual, al exhortar a todos los países a que se unan en la lucha contra el virus. El director general insistió en que ningún país, por más poderoso que sea, tiene acceso al mismo tiempo a la investigación y desarrollo científico, a la capacidad de manufactura y a toda la cadena de suministros necesarios para el material y las medicinas esenciales.
"El nacionalismo de suministros exacerbó la pandemia y contribuyó al fracaso total de la cadena de suministro global", remarcó. Y, agregó: "Nadie está a salvo hasta que todos estén a salvo. Ningún país tiene acceso a la investigación, el desarrollo, la fabricación y a toda la cadena de suministro de todos los medicamentos y materiales esenciales".
Bruce Aylward, uno de sus consejeros, indicó que los términos del nuevo dispositivo se están ultimando, pero más de 170 países (que representan casi al 70% de la población mundial) ya afirmaron que quieren integrarse a esta iniciativa o al menos manifestaron su interés.
"Esperamos una respuesta firme de todos los países para el 31 de agosto", añadió el consejero. Mientras la carrera por las vacunas se intensifica, la pandemia del coronavirus provocó hasta el momento 775.000 muertes en todo el mundo desde fines de diciembre.
Qué es Covax
COVAX está codirigido por Gavi, la Coalición para las Innovaciones en la Preparación ante Epidemias (CEPI) y la OMS, y trabaja en asociación con fabricantes de vacunas de países desarrollados y en desarrollo.
La iniciativa buscsa que se compartan los riesgos asociados con el desarrollo de vacunas, invirtiendo en la fabricación por adelantado para que las vacunas se puedan implementar a gran escala tan pronto como se demuestre su éxito, y agrupando las adquisiciones y el poder adquisitivo para lograr volúmenes suficientes para poner fin a la fase aguda de la pandemia para el 2021.
El objetivo de COVAX es para fines de 2021 administrar dos mil millones de dosis de vacunas seguras y efectivas que hayan pasado la aprobación regulatoria y / o la precalificación de la OMS. Estas vacunas se entregarán por igual a todos los países participantes, en proporción a sus poblaciones.
Cómo se distribuirán las vacunas
Una vez que las vacunas estén disponibles, la OMS propone que sean atribuidas en dos fases siguiendo el mecanismo COVAX.
"Durante la primera fase, las dosis serán distribuidas de manera proporcional y simultánea a todos los países participantes (en COVAX), con el objetivo de reducir el riesgo global. En la fase 2, se tendrá en cuenta la amenaza y la vulnerabilidad de los países", explicó Tedros Adhanom Ghebreyesus.
"La manera más rápida de poner fin a esta pandemia y reactivar las economías es comenzar por proteger a las poblaciones más expuestas en todas partes del mundo, y no a poblaciones enteras en unos pocos países", agregó.
"Se dará prioridad a los trabajadores que están en primera línea (de fuego) en los establecimientos de atención sanitaria y social, puesto que son fundamentales para atender y proteger a la población, y se encuentran en contacto estrecho con colectivos con un alto riesgo de mortalidad", continuó, haciendo alusión a los mayores de 65 años y a aquellos con otras patologías que pueden combinarse de manera negativa.
"Para la mayoría de los países, una atribución (de vacunas) durante la fase 1, que permita alcanzar al 20% de la población, cubriría la mayoría de los grupos de riesgo", señaló el director general de la OMS.