Sebastián García de Luca, referente en Diputados del ala dialoguista que encabeza Emilio Monzó, señaló que para volver a ser alternativa de Gobierno Juntos por el Cambio tiene que tender a la moderación y alejó los fantasmas de una posible fractura. 

--La marcha del #17A volvió a exponer las fisuras dentro de Juntos por el Cambio ¿Qué análisis hace de lo sucedido el lunes?

--Siempre está bien que la sociedad se manifieste en términos pacíficos, más allá de las consignas. Y tomando la mayor prudencia sanitaria en este caso. Ojalá el gobierno escuche el reclamo en lugar de atacarlo. El error está en los dos extremos de la dirigencia política: en el que intenta negar lo que ocurrió ayer, confrontarlo y en el que intenta ponerse por delante de ese reclamo que fue heterogéneo y excede a un partido político.

-- Jaime Duran Barba dijo que Macri ya no es el líder de la oposición. ¿Coincide?

--Yo creo que la oposición está en un proceso posderrota y de discusión más horizontal. Obviamente aparecen nuevos liderazgos y disputas dentro de los espacios. Hay que reconstruir la alternativa, hay que consolidar ese 40% que nos votó, pero con eso no alcanza porque yo, y muchos otros, no queremos ser una oposición intensa. Queremos volver a ser una alternativa de gobierno, para eso hay que ser moderados y buscar una alternativa dentro desde Juntos por el Cambio. Por eso hay que construir una alternativa de centro dentro de Juntos por el Cambio.

--¿Así como está delineado hoy el mapa de situación el panorama político, sanitario y económico cuál es el debate urgente?

--Hay dos debates, primero la urgencia que requiere un nivel de consenso para tratar de apaciguar los conflictos que aparecen buena parte de la sociedad. Pero eso no tiene que ocultarnos los problemas estructurales que tiene la Argentina. Muchos países van a tener una capacidad de reacción y un menor impacto en los problemas que nuestro país que viene con problemas estructurales desde hace décadas. Hay dos agendas, una la de la urgencia y otra de la estructural. Hay que encontrar una dinámica para buscar los temas sensibles y lograr consenso entre los distintos sectores de la política.

--¿Ustedes, como Juntos por el Cambio, que están dispuestos a acordar?

--Nosotros, con Emilio Monzó y Rogelio Frigerio, siempre nos hemos mantenido dispuestos al dialogo y buscar el acuerdo en temas que hagan a los estructural. Por ejemplo, en la modificación del sistema tributario para ver cómo se puede recuperar al 40% de la Argentina que vive en negro. Inclusive estamos dispuestos a debatir el sistema previsional, que siempre es un tema sensible, pero que es algo que requiere una modificación para hacerlo sustentable. Además, nos parece que es central discutir los temas que tiene que ver con la clase media argentina, que fue un orgullo y que ha ido disminuyendo.

--Que tan extendida está la postura de aportar una mirada racional para dar las discusiones pensando en lo que viene. ¿Piensa que su posición es mayoritaria dentro de Juntos por el Cambio?

--No lo sé. Pero creo que dependerá también del momento en el que el gobierno tome la iniciativa y haya algunos sectores que no quieran dialogar. Pero hoy no creo que hay margen para no hacerlo.

--¿Por qué el ala dialoguista del PRO también rechaza la reforma judicial?

--Es un debate que no representa para nada las prioridades que tenemos hoy. No digo que el Presidente tenga que convocar a todo el mundo para que cada tema, está claro que no porque para eso fue elegido, pero en el tema judicial, con lo que ello implica para la mitad de los argentinos que no voto a este Gobierno me parece que tendría que tener otra dinámica.