Los dos partidos como local que le restan a River en la fase de grupos de la Copa Libertadores se jugarían en Avellaneda, ya que la dirigencia del club millonario está gestionando que se le habilite la cancha de Independiente o en su defecto en la de Racing para esos encuentros, ya que el estadio "Monumental" está siendo refaccionado y no podrá utilizarlo en lo que resta del año.

En ese contexto, los dirigentes de River gestionan ante la Conmebol que habiliten para la Libertadores el estadio de Independiente, que por el momento está únicamente autorizado para la Copa Sudamericana. Como segunda opción manejan la posibilidad de Racing para los partidos que le quedan como local en el Grupo D, que serán el 30 de septiembre ante San Pablo y el 20 de octubre frente a la Liga de Quito, según adelantó a Télam una fuente cercana a la comisión directiva "millonaria".

River lleva adelante una serie de obras en el campo de juego del estadio "Monumental" y no lo usará hasta 2021, de manera que necesita resolver su localía en la Libertadores, ya que para jugar el torneo local tomó la decisión de hacerlo en su predio deportivo de Ezeiza, habida cuenta de que el retorno del fútbol será sin público.

La cuestión de la intensidad lumínica (4K) para las transmisiones televisivas es el gran problema a resolver para elegir un estadio y por esa razón se descartó uno de Capital Federal como el José Amalfitani, de Vélez Sarsfield, que era por cercanía el más cómodo para los traslados del plantel que conduce Marcelo Gallardo.

De todos modos y si surgen inconvenientes por temas de habilitaciones, la institución "millonaria" maneja como segunda alternativa ya aprobada por Comebol el estadio Juan Domingo Perón del Racing Club o, en su defecto, el de Argentinos Juniors.

Más allá de las cuestiones coyunturales de la pandemia que obliga a jugar sin público, River debía cumplir una sanción de la Conmebol y ambos partidos mencionados, ante San Pablo y Liga de Quito, se iban a disputar de todos modos sin gente.

River retomará la Libertadores el 17 de setiembre ante San Pablo en Brasil y una semana después viajará a Perú para jugar ante Binacional, en estadio a confirmar.

Para ambos partidos el cuerpo técnico está planificando una burbuja sanitaria que se haría en el hotel Holiday Inn de Ciudad Evita cerca del predio River Camp, ubicado en Ezeiza, en lo referido a los aislamientos que obligan los viajes al exterior debido a la pandemia de coronavirus.