El actor británico Ben Cross, conocido por su papel como Harold Abrahams en la película Carrozas de fuego, falleció hoy a los 72 años. Su hija Lauren dio la noticia a través del perfil de su padre en Facebook.
“Queridos seguidores de Ben Cross. Tengo el corazón roto al compartir con ustedes que mi querido padre murió hace unas horas. Había estado enfermo durante un tiempo, pero tuvo una fuerte recaída la semana pasada”, informó Lauren. En la misma publicación en la que agradeció “todo el apoyo durante estos años”, recordó cómo su padre “disfrutaba” la interacción con sus fans.
Cross había nacido en Londres en 1947 como Harry Bernard Cross y tuvo una carrera de medio siglo en cine, teatro y TV. En 1977 debutó en la pantalla grande en Un puente demasiado lejos, un film sobre la Segunda Guerra Mundial dirigido por Richard Attenborough y protagonizado por Sean Connery y Michael Caine.
Sin embargo, obtendría fama mundial con Carrozas de fuego, que obtuvo cuatro pemoios Oscar, incluyendo el de mejor película en 1981. El film dirigido por Hugh Hudson (y que tuvo entre sus productores a Dodi Al Fayed, el malogrado novio de Ladi Di que murió con ella en el accidente de 1997), narra la historia real del equipo olímpico de atletismo del Reino Unido en los Juegos Olímpicos de París, en 1924, y es recordado también por la banda sonora que compuso Vangelis.
En la película se plantea la rivalidad entre Eric Liddell, interpretado por Ian Charleson, y Harold Abrahams (Cross). Liddell era hijo de un pastor protestante; Abrahams, venía de una familia judía y estudiaba en Cambridge. Ambos aspiraban a medir fuerzas en los 100 metros llanos. Sin embargo, Liddell no compitió porque la prueba era en domingo y eso contradecía sus creencias religiosas. Finalmente, corrió en los 400 metros y se llevó el oro. Abrahams ganó la prueba de 100 metros.
Tras la muerte de Charleson, en 1990, víctima de SIDA, la muerte de Cross significa la desaparición de los dos protagonistas del film. Hace pocas semanas había fallecido Ian Holm, quien cumplió el papel del entrenador de Abrahams en Carrozas de fuego y recibió una nominación al Oscar por ese rol.
Después de aquel éxito de comienzos de los 80, a Cross se lo pudo ver en Lancelot, el primer caballero (1995), El último viaje de Robert Rylands (1996), Turbulencia (1997) y El exorcista: El comienzo (2004). Sin embargo, quedó ligado a Carrozas de fuego, revitalizada tres décadas después de su estreno cuando Londres fue sede de los Juegos Olímpicos.
Las generaciones más jóvenes lo reconocían por el rol especial que desempeñó en la primera de las nuevas películas de Star Trek a cargo de J.J. Abrams. En Star Trek: El futuro comienza (2009), interpretó al padre del icónico Spock.