El expresidente del Consejo de la Magistratura, Luis María Cabral, manifestó su apoyo al proyecto de reforma judicial que impulsa el gobierno nacional. El ex magistrado, que tuvo sus roces con el kirchnerimo en el pasado debido a la ley de subrogancias, aseguró que el oficialismo propone "una reforma correcta en lo sustancial" y rechazó que el proyecto tuviera como objetivo "garantizar la impunidad k". "Acostumbrémonos a que el poder político se establece por la voluntad popular. Hay críticas que me parecen desmedidas", declaró.
“No hay que enamorarse de los sistemas de una manera fanática, los sistemas tienen que ir adecuándose. No hay que defender la 'pureza' de un sistema sino la corrección de su funcionamiento y la adecuación a cada tiempo", explicó Luis María Cabral en declaraciones con Radio Antena Pueblo. Expresidente de la Asociación de Magistrados, expresidente del Consejo de la Magistratura y ex juez del Tribunal Oral Criminal, Cabral fue un magistrado con una extensa carrera judicial que supo tener algunos encontronazos con el gobierno de Cristina Fernández. Desplazado en el 2015 de la Cámara de Casación por la ley de subrogancias - la oposición de entonces denunció que el gobierno lo había removido para evitar un fallo en contra del Memorándum de Entendimiento con Irán -, Cabral acusó al Ejecutivo de "manipular" la Justicia. Cinco años después, sin embargo, aseguró que "hay que reformar muchos aspectos en la Justicia nacional y federal" y defendió el proyecto de reforma judicial que impulsa el gobierno de Alberto Fernández.
Luego de calificar como "correcta" la decisión de unificar los fueros federales de Capital, Cabral celebró la "duplicación de los juzgados" argumentando que "facilita la velocidad en la resolución, amplía la diversidad, da la posibilidad de renovar con gente más joven y mayor participación de mujeres". “Hay cosas para discutir, por supuesto. Pero para eso están las cámaras del Congreso”, determinó, calificando como "desmedidas" varias de las críticas realizadas al proyecto por algunos sectores del Poder Judicial. En este sentido, consultado sobre si no creía que la reforma tenía como objetivo garantizar la "impunidad" de algunos ex funcionarios del kirchnerismo que actualmente tienen causas de corrupción en su contra, como es el caso de la vicepresidenta, Cabral fue tajante: "El proyecto de ley tiene un artículo dedicado especialmente a ese tema y establece que todas las causas actualmente en trámite continuarán ante los mismo jueces que las llevan".
"Acostumbrémonos a que el poder político se establece por la voluntad popular, no porque unos u otros quieran imponer su condición. Después si en los hechos hay una manipulación, bueno, se analizará entonces cuando la haya", indicó el ex juez, quien, al final, destacó que la "independencia de los jueces no solamente es de otros poderes políticos, sino que también lo es de los poderes fácticos, económicos, culturales y mediáticos".