La jueza en lo Contencioso y Administrativo Tributario Federal Alejandra Biotti rechazó el amparo que habían presentado Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi para evitar ser removidos de la Cámara Federal porteña, en la que fueron puestos por el ex presidente Mauricio Macri sin acuerdo del Congreso Nacional, tal como lo establece la legislación.
Los camaristas habían apelado la vuelta a sus cargos iniciales, al menos hasta que el Senado revise sus nombramientos calificados como “irregulares” por no cumplir con los procedimientos habituales. Tanto Bruglia como Bertuzzi habían sido “ascendidos” a jueces federales con sede en Comodoro Py por el gobierno de Juntos por el Cambio, junto con otros ocho magistrados.
A finales de julio pasado, un día después de que el presidente Alberto Fernández presentara el proyecto de reforma judicial, el Consejo de la Magistratura resolvió la revisión de esos nombramientos. El organismo emitió un dictamen que indica que los nombramientos habían sido incompletos y los remite al visto bueno del Poder Ejecutivo para que este analice las irregularidades y los envíe, a su vez, al Senado para su aprobación.
Ambos jueces plantearon la supuesta inconstitucionalidad de esa medida. Sus argumentos son que la Constitución nacional establece que los jueces son inamovibles y sus remuneraciones son intangibles. Sin embargo, sobre lo que hubo un manto de sombras fue el respeto de los pasos institucionales para llegar a esos cargos.
Biotti ya había dado un revés al planteo de Bruglia y Bertuzzi, cuando el 12 de agosto pasado sostuvo que la revisión de sus traslados "no advierte una afectación grave al principio de tutela jurídica" .
El Frente de Todos considera que deben ser evaluados por el Senado para determinar si tienen que permanecer allí o volver a los puestos originales para los que sí habrían cumplimentado con la normativa.