La ley de cupo femenino en los festivales, que se sancionó en noviembre de 2019, exige un 30% de participación de mujeres y disidencias en festivales. En Salta, su aplicación para la temporada de festivales de verano fue todo un desafío que se consiguió sobre la base de reclamos y campañas emprendidas por las propias músicas. Pero actualmente en la pandemia y con el sector artístico en una gran crisis, el cumplimiento de la ley parece que fuera cosa del pasado.
La integrante de la Colectiva Musxs - Mujeres e identidades diversas en la música, Celeste Martín, sostuvo que la ley 24.012 “no se aplica”. Consideró que la gran mayoría de los festivales o eventos que se están desarrollando desde hace dos meses de manera virtual “no están cumpliendo con la ley”. Y dijo que algunos están "denunciados” ante el Instituto Nacional de la Música (INAMU).
Tal es caso del Festival Cantores Solidarios realizado el 20 de junio por Alejandro Palacios y que se transmitió por Canal 9 Multivisión y radio La Cacharpaya. De los catorce artistas en escena, sólo dos fueron encabezados por mujeres (se necesitaban cuatro para cumplir con el cupo). En esa oportunidad las figuras femeninas fuerons Marcela Ceballos y Vanessa Paz, quien tocó junto a Los Teuco.
Otro de los casos fue el Festival del Fogón de los trabajadores realizado el 5 de agosto por el conocido organizador Pastor “Pascar” Cari. La grilla estuvo compuesta por trece números y necesitaba un mínimo de cuatro solistas o grupo de mujeres. Sólo hubo tres: Noelia Aybar, Marcela Ceballos y el grupo Atemporal. El resto se completó con artistas hombres de renombre como el Chaqueño Palavecino y Los Nocheros.
La música salteña Verónica Méndez dijo que en los festivales que se realizan en la provincia, la incorporación de proyectos de artistas mujeres o del Colectivo LGBTIQ+ "han sido mínimos” además de tener siempre “un tiempo súper reducido en cuanto a la presentación de sus proyectos”.
Señaló que no se ven "grandes cambios a lo que son los recitales virtuales online” con respecto a los eventos presenciales y el cumplimiento de la ley. Sostuvo que uno de los grandes problemas a los que se enfrentan las músicas tiene que ver con el accionar de la Secretaría de Cultura de la provincia de Salta, “el órgano que supuestamente debiera velar para que la ley se cumpla”.
Méndez integra la Comisión de Género de Músicos Independientes Asociados de Salta, la Colectiva de Mujeres y Disidencias Músicas de Salta y el Movimiento de Músicas Salteñas. Consideró que tras los constantes reclamos que ya había desde el inicio de la gestión de la secretaria Sabrina Sansone hubo otras acciones que “perjudican bastante la posición de hacer cumplimentar una ley que está reglamentada”.
En ese sentido, dijo que el mayor reclamo tiene que ver con la situación de emergencia en que se encuentran los trabajadores de la cultura por la pandemia y que fue manifestada por distintas organizaciones y disciplinas del arte nucleadas en la Multicultural de Salta. El pedido va desde políticas inmediatas para solucionar el alimento diario de los artistas hasta el acompañamiento a políticas a medianos y largos plazos post pandemia.
Méndez aclaró que es necesario que se reconozca a la Multicultural como organización y “no como partes actuantes individuales”. Y en ese sentido criticó que Sansone convocara "a las organizaciones por separado, a sabiendas de que existía una organización que las nucleaba”. Dijo que desde los primeros encuentros hasta hoy, los actores culturales mantienen un "nulo acompañamiento" por parte de la gestión actual mientras reclaman el tratamiento del proyecto de Ley de emergencia cultural.
Por lo que consideró, que la ley de cupo femenino quedaría en un segundo plano dejando que los organizadores y productores dispongan del armado de grillas sin un actor que controle su implementación.
En esa línea, aclaró que el órgano rector que dispuso la ley es el Instituto Nacional de la Música. “Ahí podemos hacer las denuncias, pero como órgano de aplicación está la Secretaría”, indicó. “Acá (en Salta) eso no se está cumpliendo y según la información que tenemos de otras compañeras, tampoco en el resto del país”, sostuvo. Sin embargo, manifestó que con las demás artistas se dispusieron a tener “mucha más paciencia de la que ya venimos teniendo” entendiendo que se trata de un cambio social “muy grande” que va a avanzar “de a poco”.
Para Martín, la legislación es esencial puesto que permite marcar cambios, señaló que por eso, tras lograr la ley nacional, están buscando que se apruebe una ley en la provincia. “Estamos trabajando con algunas diputadas, pero por la pandemia está a medio camino”, lamentó.
La compositora también destacó que si bien la pandemia afectó a varios sectores, la situación en el arte es "peor". “Muchos vivimos de los que hacemos así que está realmente difícil”. La música además forma parte de Músicas de Salta y de la Multicultural y subrayó que es necesario "sacar a flote" la Ley de emergencia cultural para “poder sobrellevar la situación y por fin, también, hacer que los artistxs tengamos derechos”.
Concientizar para el cambio social
Méndez señaló que para que se haga efectivo el cambio social de poder ver a más mujeres y diversidades en el escenario es necesario que no sólo las músicas se den la tarea de hacer cumplir la ley, sino que “la gente que está del otro lado en algún momento también se involucre”. Por eso, criticó que desde la Secretaría de Cultura de Salta no existan campañas de concientización de la ley porque “la gente no sabe qué es ni de qué se trata”, lamentó.
Incluso indicó que un gran número de sus pares mujeres “no saben lo que significa tener una ley de esta magnitud, no la entienden”.
En consecuencia y analizando su propio ambiente laboral, Méndez dijo que “hay una gran parte de la población que aún tiene un desconocimiento profundo de que la ley intenta equiparar a nivel laboral artístico”. Esa equiparación es fundamental con las mujeres y disidencias que se enfrentan “a un sistema patriarcal y machista dominante por excelencia sobre todo en el norte”, resaltó.
“Cuando una ley no se conoce en profundidad, desde lo que significa al impacto social, genera mucha resistencia desde múltiples miradas”, graficó. Por eso, señaló que“mientras no haya una concientización y visibilización de esta ley nuestra sociedad va que seguir generando resistencia” porque “una sociedad se resiste a los cambios y sobre todo a lo que no conoce”.
“Con esta ley se intenta visibilizar y revalorizar el trabajo de las mujeres y disidencias en la cultura musical históricamente cercenado”, destacó Méndez. En tanto, Martin deseó que "en un futuro no tengamos que estar detrás de todo para que las chicas y las identidades diversas tengan su lugar en un escenario”.